Hoy hemos tenido un día movidito y Enzo no tenía muchas ganas de dormir así que cuando sus hermanos se durmieron se nos ocurrió jugar a un juego, Algo súper sencillo y que a él le encantó. Gracias a este juego se ha aprendido varios colores en un momento, de manera divertida y sin darse cuenta. Os pongo el vídeo de cómo ha jugado con su padre, máxima concentración jeje.
Bueno pues este juego sólo necesitamos 2 materiales que nos ha salido muy pero que muy barato. Palitos de madera ( 0.65 E) y vasos (0.75 ). Los que me conocen saben que cuando voy a un bazar mi cabecita no para de dar vueltas imaginando posibles juegos con ellos y vaya para lo que vaya siempre acabo comprando alguna cosilla de más y en este caso fueron los palitos que en verdad los tengo para otro juego con Unai pero como a Enzo no había quien lo durmiera y las horas que eran no eran para andar con los coches corriendo ideamos este juego tranquilito. Mi intención era que se aprendiera un par de colores pero me ha sorprendido y se ha acabado nombrando algunos más. Son una esponja.
Estuvimos un buen rato clasificando palos y luego los tiraba y vuelta a empezar. Su papá los cogía de uno en uno y le iba diciendo el color y él lo colocaba en el vaso correspondiente repitiendo el nombre. Como nuestros vasos eran blancos le habíamos colocado previamente un palo de cada color en cada vaso y a partir de ahí él continua.
Con la concentración casi que no grabo nada y me acordé, terminando ya, de vosotros y os grabé un pequeño vídeo donde lo podéis ver en plena faena. Espero que os guste y que os animéis a hacerlo con vuestros peques.
Fuente: este post proviene de Pipindira y su familia numerosa, donde puedes consultar el contenido original.
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