Desde que el peque ha comenzado con los solidos ya no hacemos la pechuga rebozada, porque cuando se la cortaba en trozos pequeños el rebozado se separaba de la carne y perdía su gracia. Además le gusta comer con las manos (así le han enseñado en la guarde) y él siempre se enfadaba porque quería coger el filete de pechuga entero.
Ahora nos hemos pasado a los Nuggets y los Fingers que son mucho más fáciles de comer y el rebozado envuelve todo el bocado de pollo. La verdad es que es una receta muy fácil y rápida de hacer.
Ingredientes:
Un huevo batido (chorro de leche opcional)
Un plato hondo con harina de maíz precocida
Pechugas de pollo cortada en tiras
Aceite de girasol
Sal
Pimienta negra molida (opcional) yo no sazono las que va a comer el niño.
¿Cómo hacerlo?
Cogemos una pechuga y la cortamos en tiras (yo hago una por persona, no me importa si sobra un poco), le echamos un poquito de sal, pasamos los trozos por el huevo batido (para ahorrar tiempo cojo un puñado, no los hago de uno en uno), después enharino el puñado que he pasado por el huevo (fijándome que estén bien cubiertos de harina por todos los lados).
Cuando el aceite esta muy caliente los echo de uno en uno en la sartén.
Si están ya doraditos, los saco y los pongo en un plato con una servilleta para quitar el aceite sobrante.
Espero vuestras opiniones y sobre todo que os animéis y hagáis esta receta
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