Antiguamente todo se hacía en círculo, en muchas de las tribus indígenas que sobreviven en el mundo, aun lo siguen haciendo, se reunen en círculo para tratar los temas importantes para todos, para los grandes acontecimientos como son los enlaces matrimoniales, los embarazos, los nacimientos o la crianza de los hijos.
Sin embargo en el mundo “civilizado” todo es muy distinto….. vivimos con prisas, sin tiempo de compartir con nadie, vivimos individualmente sin preocuparnos por lo que les pueda pasar a los demás.
Criamos a nuestros hijos solos, buscando la información y el apoyo que deberíamos tener con el circulo o con la tribu y lo encontramos en el mundo virtual, que si bien es cierto que se pueden crear lazos muy importantes y fuertes a veces necesitamos una mano en el hombro, un abrazo… un achcuchon como “dios manda”.
Nos hacen falta círculos, redes donde compartir como nos sentimos, donde otras madres con más experiencia nos pueden ayudar con nuestras preocupaciones.
Pero aquí entramos en un terreno muy peligroso, porque muchas veces nuestro ego no nos permite aceptar que hay personas que tienen mas experiencia que nosotras, no es que sean mas o menos listas, es que en el caso de la crianza ya han pasado por esa misma situación, y siempre que sea con respeto y educación, pueden ayudarnos mucho, aunque quizá lo que le sirve a una persona a otra no le va bien, pero siempre reconforta saber que no somos únicas, que hay personas que han pasado por nuestra misma situación.
Dejemos de lado las envidias, los egos, y todo lo que nos impide extender una mano, hablar de tu a tu al mismo nivel, comportarnos como nos gustaría que se comportaran con nosotros, sin juzgar, sin criticar y sin dar por hecho las cosas.
Compartamos nuestra experiencia, nuestros conocimientos, hagamos circulo, hagamos redes de sostén, donde nos podamos sentir seguras, comprendidas, cuidadas, sostenidas.
Hace poco llego hasta mi un poema de la poetisa africana Tolba Phanem, que os comparto aquí, y digo llegó porque pienso que no es necesario buscar las cosas… estas llegan en su preciso momento.
La canción de los hombres – Tolba Phanem por eslabonencontrado
Creo que habla mucho sobre la importancia de los círculos, de las redes ….. Sé que a veces no podemos asistir a los grupos de apoyo, porque no coinciden los horarios o a veces no nos pillan cerca y viajar con un bebe puede ser algo complicado, otras veces nos frenan nuestros propios miedos, “como voy a ir si no conozco a nadie “que van a pensar de mi” “que vergüenza”, pero yo os animo a que vayáis a que compartáis vuestras dudas y vuestras experiencias porque no sólo vais a aprender, ademas vais a ayudar a otras mujeres que quizás no se atreven a reconocerlo.