Miedo a ser madre de nuevo

Éste es un capítulo especial en el que no voy a hablar directamente de las hazañas de Mini Thor, de nuestras aventuras en sus primeros meses de vida. Ésta vez y a raíz del post de mi querida amiga, gran inspiración y guía en temas maternales, dueña y señora del blog que ha cambiado mi vida para siempre, quiero escribir sobre el miedo a la maternidad.

Lai reflexionaba no hace mucho sobre diversos tipos de miedos, como a las atracciones (que digo yo que no habrá para tanto) y luego la tía va y se tira en paracaídas, Oh My God! (Eso sí que no lo hago yo ni loca). A las arañas, miedo frecuente y extendido ¿será por tantas patas?, debería ir al Guggenheim de Bilbao y escuchar la historia de la escultura de araña gigante situada en una de sus fachadas, a lo primero impresiona y repugna a partes iguales, te descoloca porque no es Halloween, sin embargo, a mi me cambió la percepción de tan distinguido bichejo aunque sigue sin gustarme encontrármelas campando a sus anchas por lugares que acostumbro frecuentar como por ejemplo el dormitorio. El típico miedo de madre a que el niño se haga daño con TODO. Cosa que cada día comprendo más… PERO ¿y el miedo a ser madre cuando ya lo has sido? Parece una locura ¿verdad? pero no lo es, es miedo es el reflejo de un estrés, de un shock post traumático, de una vivencia difícil de superar. De ese miedo quiero tratar.

El miedo en general, en abstracto, como sentimiento arrebatador no emplea lógica, el miedo surge, te invade, se apodera de tí, te nubla la vista y el entendimiento, te hace desvariar, te enloquece, te desquicia, te inhabilita, te trastorna, se apodera de tu vida, de tu credo, de tu razón y te limita.

El miedo específico, en concreto, como sentimiento arrebatador hacia la maternidad es además de lo anterior, FRUSTRANTE.

Podría hablar de casos de los que de tenido conocimiento de primera mano sobre madre primerizas que embarazadas tuvieron un aborto espontáneo a los pocos días de saber que esperaban un bebé para su disgusto y desconcierto. El miedo a perder un segundo hijo les aterroriza durante todo el embarazo y les sigue aterrorizando cuando años después de haber parido un hijo sano se plantean tener otro bebé. O por el contrario, podría hablar de madres que viendo la maternidad ajena desde la distancia y el confort de su soledad tranquila deciden seguir sin hijos por terror a los dolores del embarazo o del parto o por la responsabilidad de tener seres dependientes a su cargo.

No obstante, a pesar de ser situaciones fascinantes y dignas de comentario y análisis, voy a hablar de mi, de mi sentimiento incapacitante, de mi situación concreta, de lo que conozco a ciencia cierta, porque es más sincero y honesto hablar en primera persona de lo que me recorre las entrañas que subjetivar la vida de los demás. Y también porque Lai me lo ha pedido de esa manera en la que es imposible decirle que NO.

Mi relato paradójicamente empieza el día antes de que mi niño precioso cumpliera 13 meses. Fui a ver a Gini, para lo que no sepan quién es brevemente les resumo, amiga mía ginecóloga, me acompañó durante el embarazo de Mini Thor, en el momento del parto y posteriormente durante el puerperio. Me tocaba la revisión anual para mi pesar, no sé vosotras pero a mí la visita al especialista de la fontanería femenina no me causa alegría alguna. Hacía 3 meses que no nos veíamos así que rápidamente nos pusimos al día con los chismes.

Charlando animadamente de nuestras cosas y de cómo me encontraba, entró mi marido con el peque para sorpresa y jolgorio de los allí presentes. Tras los comentarios ya clásicos de qué grande está, se nota que come, qué talla de ropa le pones, cómo va el tema de los pañales, etc, me hizo pasar al potro de tortura ese que tienen los ginecólogos para la revisión y tras el chequeo, con videocámara incluía cual documental del National Geographic, me felicitó porque todo estaba funcionando estupendamente.

La cicatriz estaba limpia y curada, ni rastro de desperfectos, y los ovarios listos para engendrar de nuevo. A su comentario jocoso de ya puedes tener muchos, MUCHOS niños, mi marido le contestó sarcástico, que le dejaba a Mini Thor en consulta para irnos a practicar. Arrancando su carcajada y la mía (bueno, más o menos).

De nuevo me acomodé frente a su mesa escritorio, algo incómoda tras haber estado con el culo al aire y revuelta cual lavadora, mientras ella rellenaba la pantalla del ordenador con datos médicos ininteligibles para el resto de mortales. Sin apenas desplazar la mirada de la pantalla y de modo rutinario me dijo esta vez ya más seria y con voz de profesional aplicada que a pesar de que la recomendación era esperar otro año más antes de embarazarme de nuevo, si me quedaba en breve no había demasiado riesgo o al menos no muy alto. Y sin más, ahí apareció el MIEDO. De golpe, sin saber cómo ni porqué. Me puse a llorar súper agobiada.

Rápidamente Gini reaccionó diciendo que no me agobiara, que tras un trance tan duro como el mío y siendo que Mini Thor aún era muy chiquito y dependiente no tenía obligación de repetir maternidad, que me tomara mi tiempo y cuando estuviera preparada me pusiera a ello. Me calmé aguantando el tipo aunque sólo de modo superficial.

Ahí está, el miedo alojado en mi mente, acechándome. Con pensamientos torturadores del estilo, ¿cómo voy a tener otro si casi no puedo con éste? ¿Y si ahora que puedo no quiero y cuando quiera tener un segundo hijo mi biología ha caducado? ¿Y si me sale tan grande o más? ¿Me programarán una cesárea seguro? y entonces me pasaré otros 9 meses postrada en cama sin poder andar ni atender a mis hijos. (Lloros mentales, autocompasión, sentimiento de imposibilidad, frustración, culpabilidad). He compartido mis miedos, lloros y emociones contenidas con mi madre y amigas y todas responden similar: No tiene porqué, tómate tu tiempo, aún estás muy afectada…

TOOOODOOOOO cierto, SIN EMBARGO, lo que no imaginaba y me bloquea aún más, es que una buena noticia como es el hecho de que mi cuerpo ya está a pleno rendimiento para tener un segundo niño motivo de alegría (bueno, quizá con un par o tres kilos de más para mi gusto pues soy presumida pero como tampoco tengo ganas de ponerme a dieta con el estrés que llevo), pueda causarme tanto pesar y zozobra. Y este pensamiento todavía me causa más tristeza. Mi miedo se retroalimenta así mismo de manera absurda. No obstante, mi miedo no termina aquí, a este miedo se le añade otro sinsentido, ¿y si me embarazo de una niña? ¡No sé tener niñas!

Otro miedo aún más absurdo.

Absurdo porque la razón desmonta todos y cada uno de los argumentos que lo alimentan. Y lo sé, entonces ¿por qué sigue derrotándome? Como decía no emplea lógica, sólo aparece de golpe, sin pedir permiso y atormenta. Mi trabajo mental actual pasa por pacificar está guerra interna que me desborda para poder disfrutar de mi hijo. Cuando se me enfría la cabeza después de la ardua batalla, entiendo que el tiempo me situará en el punto de saber cuándo llegará el momento de una segunda maternidad ¡al igual que sucedió con la primera! (¡pero qué cosas tengo tan incomprensibles!). Hasta entonces seguiré el consejo de mi fiel compañero y mejor amigo, mi amado marido que AFIRMA con gesto divertido, tierno y serio: ERES DIFÍCIL. Y me apuntaré de nuevo a yoga. Me fue muy bien durante el primer embarazo cuando apenas podía moverme y mi cabeza hervía de dudas ante la inminente maternidad. Entiendo que ahora es oportuno recuperar ese espacio físico y espiritual para reequilibrar mi ser ante tanta novedad.



Archivado en: Embarazo y Parto, La historia de Mini Thor, Maternidad y Crianza
Fuente: este post proviene de Asi piensa una mamá, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
¿Qué te ha parecido esta idea?

Esta idea proviene de:

Y estas son sus últimas ideas publicadas:

Muchas veces me he parado a pensar cómo las pantallas, esos dispositivos que venían a ayudarnos en nuestro día a día, en la comunicación, en el aprendizaje, han ido ganando tanto terreno, que muchas v ...

Las Navidades me dejaron una nueva lectura sobre emociones, que estoy ahora terminando. En este caso, hay algunas frases del libro que invitan a la reflexión, y me gustaría compartirlas para reflexion ...

Hace unos años vivimos una experiencia relacionada con la ansiedad en niños pequeños, que os contaba en este post. De un día para otro, sin que sepamos claramente porqué, Terremoto mayor le tenía ter ...

Recomendamos

Relacionado

Embarazo y Parto La historia de Mini Thor Maternidad y Crianza ...

Éste es un capítulo especial en el que no voy a hablar directamente de las hazañas de Mini Thor, de nuestras aventuras en sus primeros meses de vida. Ésta vez y a raíz del post de mi querida amiga, gran inspiración y guía en temas maternales, dueña y señora del blog que ha cambiado mi vida para siempre, quiero escribir sobre el miedo a la maternidad. Lai reflexionaba no hace mucho sobre diversos t ...

Historias en primera persona La historia de Mini Thor bimaternidad ...

Vuelve el blog, y con el blog vuelven las aventuras de Mini thor! Esta vez celebraremos el cumpleaños número 4 de nuestro protagonista (4 años ya, parece increíble!) con una gran noticia…pero mejor Sil te lo cuenta. Un hermano para Mini Thor. Capítulo 1. Esta semana mi pequeño gran hombre cumple 4 años. Mide 120cm, pesa 24 kilos, calza un 35 de pie y viste ropa talla niño 6-7 años. Lleva 3 ...

Historias en primera persona La historia de Mini Thor bimaternidad ...

Este es el segundo capítulo de esta historia, donde Sil va a contarnos más del difícil proceso que culminó en la feliz llegada del hermano de Mini thor. En el capitulo 1 nos contaba sobre el cumpleaños 4 de Mini Thor y cómo había ido recuperando su espacio como mujer después del tercer cumpleaños de Mini Thor que vino acompañados de su mayor independencia, así que te dejo con ella. Un hermano para ...

Blog

El miedo a ser madre es algo más habitual de lo que pensamos. Es muy normal si eres madre primeriza que de pronto te aterrorice la maternidad y no solo es algo que nos ocurra a las mujeres, en el hombre también se puede dar el miedo a tener hijos. Has estado buscando el embarazo, ha sido algo planeado, meditado, has hecho el test y te ha dado positivo, pero de pronto te asalta esa especie de fobia ...

Embarazo y Parto Maternidad y Crianza bebe grande ...

Hoy no voy a contaros nada sobre las pequeñas terremoto. Hoy quiero compartir en el blog la historia de mi amiga Sil, y de su mini Thor. Ella y yo hemos hablado mucho estos últimos meses, nos conocemos hace mucho y nos reencontramos hace poco gracias a este blog (ella es la  sonrisa 7 del repaso de 2015) y cuánto más me contaba sobre la crianza de su bebé, más ganas tenía de compartir su historia. ...

Familia Maternidad y Crianza #BloggersChile ...

Hoy en día, por suerte, hay cada vez más movimientos en favor de conciliar, como mamiconcilia o #yonorenuncio, cada vez nos damos más cuenta de la importancia que es pasar tiempo con los pequeños, de tener calidad y cantidad con ellos. Vamos en busca de soluciones para mejorar nuestra calidad de vida en familia, promovemos la lactancia materna, el piel con piel al nacer, desaparece el tabú al cole ...

Familia Maternidad y Crianza #BloggersChile ...

Hoy en día, por suerte, hay cada vez más movimientos en favor de conciliar, como mamiconcilia o #yonorenuncio, cada vez nos damos más cuenta de la importancia que es pasar tiempo con los pequeños, de tener calidad y cantidad con ellos. Vamos en busca de soluciones para mejorar nuestra calidad de vida en familia, promovemos la lactancia materna, el piel con piel al nacer, desaparece el tabú al cole ...

Maternidad y Crianza bebe grande Minithor ...

Sil vuelve con otro episodio de sus aventuras con Mini Thor. ¿No conoces a Sil? Ella es mi amiga y mamá de mini Thor, quien accedió a contar en este blog su experiencia como madre primeriza de un bebé grande. No puedes perderte los capítulos anteriores: cómo fue su embarazo, las particularidades del parto y la dificultad de los primeros días. Y hace unos días nos contaba cómo ha comprobado que a p ...

Embarazo y Parto Maternidad y Crianza bebes grandes ...

Vamos con el capítulo 3 de la historia de Mini Thor, donde Sil nos contará cómo fueron sus primeras horas como madre. Si es el primer post de la historia que lees, puedes leer aquí el capitulo 1 sobre el embarazo y el 2 sobre el parto. De San Expedito a San Jorge Nos quedamos con la enfermera entrando por la ropa del bebé y sentenciando “¿Sólo has traído esto? ¿Esto tan pequeño?” con v ...

Mi mundo

No se si sabes que una de mis metas para este año 2016 era ser organizada en el trabajo, cosa que estoy consiguiendo y que además estoy super feliz y orgullosa de mi misma por ello. Me propuse tener una organización al 100% en el trabajo para después no encontrarme sorpresas a última hora, si ya de por si salen imprevistos imagínate tenerlo todo guardado en la cabeza, al final siempre iba corriend ...