Después de mucho tiempo he visto que no es algo ‘llamativo’ para ellos y ellas. Obviamente no tienen la consciencia de que es beneficioso para ellos, así que por qué se van a cuidar… Es mucho más llamativo un bollo industrial con un envoltorio de colorines y en el que regalan unos ‘cromos’. Y eso, claro está, la fruta no nos lo da.
Y igual que empezaba la frase de antes, después de mucho tiempo os puedo dar algunos consejos que han funcionado en mi casa y con los que he hecho que la fruta sea un alimento indispensable en su dieta. En mi casa se come fruta A DIARIO, algo de lo que estoy altamente orgullosa.
El primer consejo es predicar con el ejemplo. Los niños aprenden por imitación, así que si nosotros comemos fruta ellos van a querer comer fruta, es así de simple. Sin forzar la máquina, simplemente comiendo a su lado frutas y a veces preguntándoles si quieren probar un poco.
Otro gran truco que también funciona muy bien (y que personalmente a mi me gusta mucho) es dándoles fruta mediante zumos. Pero zumos naturales, exprimidos por nosotros mismos. Así podemos mezclar algunas frutas distintas, es más vistoso y muy sabroso. Yo nunca le añado azúcar.
Finalmente, este truco a mi no me gusta demasiado, pero conozco de gente a quien le ha funcionado. No es que sea mala idea, simplemente es jugar al mismo juego que juegan las marcas de bollería industrial. El truco reside en ‘disimular’ la fruta en envoltorios llamativos para que así los niños se fijen también en el marketing de la fruta. Como digo, a mi no me gusta, y no lo he utilizado nunca, pero os lo digo porque conozco de gente a quién le ha funcionado.
Como siempre os pediré que me comentéis qué tipo de trucos habéis utilizado (o estáis pensando en utilizar) para dar fruta a vuestros hijos e hijas. Muchas graciaaaaaas!