Todo empezó el martes por la tarde al salir del cole, vimos a la princesa un poco decaída pero pensé que era del sueño que tenía. Al llegar a casa comió lo nunca visto (reconozco que mi princesa como de todo y todo lo que la pongas), pero con la edad que tiene pues ahora nos cuesta más que coma. El caso es que comió demasiado y cuando ella come demasiado malo. Efectivamente, después de la siesta se levanto con 38.5 de fiebre, la tarde la pasó bastante mohína en el sillón. Aunque se le paso la fiebre con el Dalsy, no la veíamos bien, ceno muy poquito y nos fuimos a la cama. En la mitad de la noche se despertó vomitando, menos mal que estaba durmiendo conmigo, y la volví a tomar la temperatura y "zas" le había subido a 39.5, esperamos un rato haber si era por el calor de haber estado durmiendo y del vomito, pero nada seguía igual.
Eso ya me estaba empezando a extrañar, la cogí y la metí en la ducha para bajarla la fiebre y al rato ya le había bajado un centígrado así que le volví a dar el Dalsy y a la cama haber si sudaba y lo terminaba de expulsar lo que estuviera incubando. Por la mañana se levanto muy decaída pero ya sin fiebre, decidí dejarla sin ir ese día al cole por si acaso y que así descansara por lo menos un poco después de la noche que había pasado.
Después de comer la volvió a subir la temperatura, así que Dalsy otra vez y a dormir un ratito la siesta. Al despertarse se levanto sudada enterita y sin fiebre, pensé ¡ignorante de mí! Que ya se le había quitado, pero venia lo mejor. A lo largo de la tarde se la empezó a hinchar la cara, sobre la noche ya tenía hasta las cejas hinchadas y decidimos llevarla al hospital, eso no era nada normal, sin fiebre, sin vómitos, sin ningún síntoma??
Al llegar le contamos que había tenido fiebre y vómitos y que al despertar de la siesta se levanto hinchada y como con alguna ronchita por el pecho y espalda, pero para nuestra sorpresa al quitarla la ropa para que la vieran, tenía todo el tronco y parte de las piernas llenita de ronchas. Era como si las ronchas raspasen, vaya sensación más rara que tuve. Decidieron hacerla la prueba del Estreptococo (consiste en meter un palito hasta la garganta y coger una muestra, tipo C.S.I) y bingo, dio positivo, eso quería decir que tenia Escarlatina.
La Escarlatina es una infección estreptocócica del grupo A. Hoy en día no es una infección muy habitual pero según un estudio 3 de cada 100 niños la sigue cogiendo. Se puede coger hasta tres veces y ya nos es tan peligrosa como antes. El estreptococo es una bacteria que está en la garganta y son como unas placas pero a lo bestia. Este virus mal curado puede traer consecuencias bastantes graves después.
Por lo general, la escarlatina la puede contraer cualquier persona, pero afecta más a los niños de entre 5 y 12 años.
SINTOMAS FRECUENTES DE LA ESCARLATINA:
Garganta dolorida y muy enrojecida.
Fiebre con 38.5 o más.
Sarpullido rojo con textura de papel de lija.
Piel de color rojo intenso en los pliegues de la axila, el codo y la ingle.
Lengua o parte trasera de la garganta recubierta con una capa blancuzca.
Lengua "aframbuesada" o "de fresa".
Dolor de cabeza.
Nauseas o vómitos.
Inflamación de los ganglios.
Dolores en el cuerpo.
La escarlatina se trata con antibiótico, en mi caso nos mandaron el "Penilevel" para 10 días. Normalmente a las 48h de tratamiento, el virus ya no es contagioso. Le pregunte si había peligro por el embarazo y me comento que antiguamente era más peligroso pero que ahora no, que después de pasar dos días con ella si no me había contagiado ya era imposible. El jefe de mi madre que es pediatra también me comento que ya una vez el feto gestado no hay peligro, pero que aun así tuviera muchísima precaución.
Como os comente antes, si la escarlatina no se cura bien puede tener complicaciones después, os nombre algunas de las complicaciones que se pueden llegar a tener.
COMPLICACIONES DE LA ESCARLATINA:
Fiebre reumática (enfermedad inflamatoria que puede afectar al corazón, las articulaciones, la piel y el cerebro).
Enfermedad renal o de los riñones (inflamación de los riñones llamada glomerulonefritis posestreptocócica).
Infecciones de oído (otitis media).
Infecciones de la piel.
Abscesos en la garganta.
Neumonía (infección pulmonar o de los pulmones).
Artritis (inflamación de las articulaciones).
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