Los padres no podemos delegar su educación en estos temas, y mucho menos debemos convertir estos dispositivos en sus niñeras digitales. Tenemos que cuidar la sobre exposición.
Nuestro cometido, en su formación tecnológica es, principalmente, de acompañamiento, de supervisión y control. Igual que hemos acompañado a nuestro hijos en sus primeros pasos en su vida, en sus primeras pedaleadas en bici o a mantener el equilibrio con los patines o primeros chapuzones aprendiendo a nadar …, también debemos acompañarles en sus primeros pasos en internet.
Suelen empezar su vida virtual con juegos online (Candy Crash, Minions, …) Después pasan a herramientas de mensajería, apps del tipo SnapChat, Instagram, …, y de ahí saltan a redes sociales (Tuenti, Twitter, …)
Esta etapa educativa es esencial para su formación. Cualquier sugerencia, consejo, indicación tuya va a ser acogida y tomada con gran agrado y autoridad. Los niños son como esponjas. Nosotros simplemente tenemos que aplicar el sentido común, hay que enseñarle, con su lenguaje, que no debe hacer nada en su vida virtual que no haría en la vida real. En este periodo evolutivo aún podemos influirles para el buen uso de la tecnología.
No se trata de prohibir, no funciona prohibir, funciona educar.
¿Sabes que existen herramientas, aplicaciones y webs diseñadas para ellos? Un par de ejemplos:
Buscador de Google para niños KidRex (puedes acceder a él haciendo clic aquí)? Es un buscador totalmente filtrado.
Youtube para niños Es la app YouTube Kids
¿Has pensado en aprovechar sus habilidades para aprender de ellos?. ¿Por qué no? Puedes leer más haciendo clic aquí (el vídeo es buenísimo)
Fuente: este post proviene de Padres en la Red, donde puedes consultar el contenido original.
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