Así que una vez finaliza el periodo lectivo comienza el pistoletazo de salida para esta temporada estival de libertad donde abandonar la monota rutina. Los niños tienen tendencia a acostarse más tarde de lo habitual y romper con las rutinas habituales del resto del año, afectando también a las comidas.
Como a los adultos este periodo de libertad y descanso les ayuda mucho a los niñ@s para desconectar de cargas y obligaciones, para así jugar y recargar las pilas y liberar la mente. Esto es muy positivo para todos, de esta forma siempre se pueden asumir los nuevos retos que están por llegar.
Pero volviendo otra vez al tema del repaso, cada vez hay más estudios que corroboran que su ritmo de aprendizaje se ve modificado al dejar de lado completamente los estudios. De esta forma lo más recomendable es ir repasando un poco cada día de forma amena y que no suponga excesiva carga ni aburrimiento. La escritura, la lectura, los números y las operaciones, haciendo lista de la compra, leyendo carteles de la calle, matrículas, etc.
Las tareas de apoyo que estamos comentando son bien para asentar conocimientos o bien para los que no haya cumplido objetivos durante el curso, básicamente para niñ@s de cuatro o cinco años en adelante. Como se ha dicho anteriormente se debe hacer hincapié en tareas como la lectura y la escritura de forma más divertida y menos rígida que como cuando lo hacen en horarios lectivos.
El tiempo requerido para estas tareas suele estar comprendido entre un cuarto de hora y veinte minutos diarios de plena dedicación. A la semana con tres o cuatro veces será suficiente para asentar y consolidad los conocimientos.
Las mamas y papás siempre debemos mantener una actitud positiva y de forma divertida para los peques lo cojan con ánimo. Lo mejor es elegir las primeras horas de la mañana ya que su nivel de energía y atención son más altos y además no hace tanto calor. Podemos incorporar nuevos libros y conceptos para mejorar su nivel de creatividad e ingenio.
Para las matemáticas los recomendable es realizar el repaso y el estudio de la forma más creativa y divertida posible, así se les hará de forma amena, por ejemplo utilizando chuches para las sumas y las restas. Los expertos también recomiendan hacer ejercicios con fotos y dibujos de las tareas que realizan a diario. Siempre podemos usarnos de los avances de las nuevas tecnologías, siempre con mesura y utilizándolos en nuestro beneficio. Para su control siempre debemos estar vigilantes o bien usando un programa de control parental. Tampoco debemos abusar de estos instrumentos digitales y tenerlos sólo un rato.
Para la escritura los cuadernillos de siempre de rubio son ideales para mejorar en escritura y caligrafía obteniendo una destreza mayor.
Los conocimientos adquiridos durante el curso pasado se deben de ir asentando poco a poco en el curso pasado. Además conforme se vaya pasando y se vaya acercando la fecha de regreso, debemos ir adaptando los horarios y la rutina para que la transición no sea muy estresante. De esta forma evitaremos ese cansancio que siempre aparece y el quedarse dormidos frente a los nuevos madrugones.
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Fuente: este post proviene de La Cestita del bebé, donde puedes consultar el contenido original.
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