Pese a que su origen es muy incierto y están presentes en muchísimas culturas, todos tienen algo en común: nos hacen reír, nos obligan a esforzarnos por mejorar y, sobre todo, nos permiten disfrutar del lenguaje de una forma muy particular.
Los juegos de trabalenguas infantiles son uno de los pasatiempos educativos más usados para desarrollar habilidades del habla en los niños. Por medio del uso de palabras y frases ordenadas de forma creativa, los pequeños aprenden a familiarizarse con las palabras mientras juegan y comparten con familiares y amigos. Es muy útil para mejorar la autoestima de los niños, mejorar la dicción, acabar con la timidez y enseñarles a hablar mejor.