Desafortunadamente, muchas veces no pensamos en los costos que la educación puede generar, no solo a la hora de pagar colegiaturas, sino también otros gastos como transporte y material, los cuales pueden incrementar considerablemente los costes, lo que muchas veces provoca que los niños no estudien en donde, como padres, nos gustaría que lo hicieran. Afortunadamente, hoy en día existen muchas opciones para poder asegurar la educación de nuestros hijos, una de ellas son los seguros.
¿Qué es un seguro educativo?
Los seguros educativos son una propuesta de las entidades financieras, los cuales tienen el fin de funcionar como un fondo de ahorro para asegurar la educación de tus hijos.
Para poder comprenderlo de manera más fácil te vamos a dar algunos ejemplos:
Pensando en que una carrera universitaria puede costar desde 150 mil hasta más de un millón de pesos, dependiendo de la institución en que se estudie, para hacer un ahorro vamos a poner un promedio de 400 mil pesos. Si tu hijo tiene hoy 4 años, eso da un plazo de aproximadamente 15 años para ahorrar para su universidad. Si pagamos por este seguro una cantidad de $2,800 pesos mensuales, en 15 años tendrás 500 mil pesos, ideales para una educación de calidad.
Sin embargo, los seguros educativos van más allá de solo ahorrar dinero, en instituciones como BBVA existen cláusulas que dicen lo siguiente:
Si llegas a faltar, tus beneficiarios recibirán el 100% de la meta de ahorro contratada y además un apoyo mensual.
Al final del plazo recibes tu ahorro. Si llegas a faltar, tu beneficiario recibirá el 100% del monto contratado.
Si pierdes tu trabajo de manera involuntaria recibes un apoyo hasta de $37,500 en una sola exhibición.
Puedes ahorrar desde $620 pesos mensuales o acomodarlo a tus posibilidades, lo que convierte a este seguro en la mejor opción para garantizar la educación de tus hijos.