El árbol de los Chupetes de Estocolmo ya cuenta con más de 12.000 chupetes que los más pequeños han colgado para desarraigarse de ellos, una bonita manera para que no se convierta en algo traumático para los niños, sino en toda una aventura.
Desde entonces se ha convertido en toda una tradición en varios lugares del mundo como Nueva York, Dinamarca, en Alemania (Dresden),e incluso en España, donde Torremolinos también se unió a esta curiosa y divertida manera de decirle adiós al chupete.
Sevilla también quiere unirse a esta tradición y ya hay un grupo en facebook para animar a todos aquellos niños que quieren 'hacerse mayores' a acercarse al árbol y colgar su chupete.
Imagen: porcupinex/Flickr
¿qué os parece esta bonita iniciativa? ¿os costó mucho que vuestros hijos dejarán de usar chupete?