1. Ayudan a mejorar habilidades psico-motoras, y conceptos claves como colores, formas y texturas. En los más pequeños estimulan la motricidad fina. Aprenden mientras se divierten.
2. Ayudan a la coordinación, cuando pintan, dibujan o utilizan tijeras.
3. Les enseña a tener paciencia y evitar la frustración.
4. Aprenden a expresar sus emociones.
5. Desarrollan habilidades sociales, al interactuar con otros niños, amigos o familiares.
6. Aprenden a seguir instrucciones.
7. Desarrollan su creatividad e imaginación, si los dejamos que elijan y usen libremente los materiales.
8. Aprenden a tomar decisiones.
No es necesario gastar mucho dinero, podemos realizar actividades sencillas con materiales reciclados.
Mientras continúo trabajando en los cubos didácticos, les propongo esta sencilla actividad que encontré en la web. Es para niños de 2 a 7 años.
Materiales:
• Hojas de papel de diferentes colores
• Crayolas o marcadores
• Pegamento Clear Glue
• Tijeras para niños (punta redonda, o de formas)
Vamos a realizar la cabeza de perrito y la cabeza de un gatitoe origami.
Para los más pequeños, los haremos nosotros, enseñándoles cómo se hace. Pero los dejaremos jugar con los papeles, aquí les propongo algunas cosas divertidas:
• Dejan que los doblen a su gusto
• Que hagan pelotas de papel y las lancen al aire.
• Si tienen en casa alguna perforadora de papel, podemos ponchar y hacer una especie de confite, póngalo en un recipiente y láncelo al aire, verán cómo se divierten.
• Tomen una hoja de papel blanco para que peguen los pedazos de papel que cortaron y hagan un diseño propio.
Los más grandes pueden hacer sus propios animalitos. Y si queremos dejar volar la imaginación, podemos decorarlos dibujando lazos en sus orejitas, o pegando flores, etc.
Aquí mis fotos. Pueden ver el paso a paso gráfico en los links que dejé arriba.
Mi pequeña pintando su gatito
Se me ocurrió hacer dos orificios en los ojos y pegarle
un palito de madera para tener unas mascaritas
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