Necesitaremos:
galletas con forma de osito (pincha para ver la masa para galletas decoradas)
cortador de ese osito
un poco de mantequilla a temperatura ambiente (o un poco de leche condensada)
fondant marrón, blanco, rosa claro y negro
tapete (mantel individual de plástico)
rodillo de fondant
cortador redondo o cuadrado festoneado
esteca con final en punta o un palillo
pincel fino
un poco de agua
opcional:
cortador ovalado para el morro
cortador redondo pequeño para las orejas
cortador redondo mediano para las patas
sprinkles de corazón (se puede sustituir por fondant morado o fucsia)
polvitos Rainbow Dust Pink Candy (para los coloretes) y un pincel suave
una gota de colorante en gel o pasta blanco (para dar el brillo)
En primer lugar untamos toda la superficie del osito con mantequilla a temperatura ambiente. También podríamos usar leche condensada, sirope de maíz o dulce de leche. A mí me gusta utilizar mantequilla porque no cambia el sabor de la galleta.
Amasamos el fondant marrón hasta que quede elástico y lo estiramos con el rodillo (con la guía más fina puesta). Conviene levantar la masa alguna vez para comprobar que no se queda pegada al tapete. Con el cortador de la galleta recortamos la forma del oso y lo pegamos en la galleta (se quedará pegado gracias a la mantequilla que hemos untado). Siempre hay que formar una bola con el resto del fondant y taparlo muy bien con film transparente.
Amasamos el fondant rosa, lo estiramos y cortamos el morro y las dos patas. Si no tenemos cortadores hacemos bolitas y las aplastamos (en el caso del morrito dándole forma ovalada). Podemos cortar las orejas utilizando un trozo de pajita (de las que son más gorditas). Primero cortamos el círculo y después volvemos a cortar quitándole un trozo como se ve en la foto. Ponemos un poco de agua con un pincel fino en la parte de atrás del fondant y lo pegamos en el oso.
Con un pincel suave le hacemos unos coloretes en el morro con los polvitos comestibles.
Utilizaremos el fondant blanco para hacer el babero (redondo o cuadrado).
Venden packs de estos moldes en varios tamaños, con un lado liso y uno festoneado muy baratos y los podemos usar para cortar fondant y galletas.
Para el chupete cortamos un círculo con la pajita, hacemos una bolita pequeña y un "churrito".
Con el mismo cortador del morrito le quitamos un trozo a los baberos. Si no tenemos cortador lo podemos hacer con un cuchillo.
ponemos un poco de agua con el pincel fino en el babero e incrustamos el sprinkle. También podemos hacer el corazón con fondant haciendo una bolita y dándole forma.
Hacemos el encaje perforando cada onda con una esteca o palillo.
Pegamos el babero debajo del morro con un poco de agua.
Para formar el chupete pegamos primero el círculo, después el churrito y finalmente la bolita (teniendo cuidado de poner muy poca agua o se nos deshará el fondant).
Con el fondant negro hacemos dos bolitas muy pequeñas para los ojos y una bolita, aplanada por un lado para el hocico. Para que los ojos se peguen bien podemos marcar donde van a ir, hundiendo ligeramente el final del pincel en el fondant. Así tienen donde caer y se quedan en su sitio.
Podemos darle brillo a los ojos, hocico y corazón con un poco de colorante blanco. Si no tenemos le podemos poner un poquito de fondant blanco ( habría que hacerlo antes de pegar en el osito).
Envolvemos bien el fondant sobrante (varias capas de film transparente y después guardamos todo en un recipiente bien cerrado).
Esperamos a que se seque el colorante y ya las podemos embolsar.
Las galletas con fondant conviene comerlas pronto, ya que el fondant se va endureciendo.
Aquí todos los ositos embolsados esperando que les ponga etiquetas con el nombre de la niña :-)