Hay un material Montessori que me gustaría compartir con vosotros para que los niñ@s empiecen con la escritura, es la caja de arena.
Es un método curioso, insólito y muy sencillo, para aprender las letras y saber reproducirlas de manera sensorial con el que los peques trabajarán la lectoescritura y la grafomotricidad. Esta es una forma divertida de practicar habilidades de pre-escritura y que mediante el desarrollo de la estimulación táctil se refuerzan las habilidades motrices finas.
Construir Caja de Arena
Primero de todo te enseñaré a construir tu propia caja de arena (hay muchos lugares que la puedes comprar si quieres), yo he utilizado un pequeño recipiente de plástico con tapa para poder cerrar cuando terminen de jugar o llevarlo a otro lugar, puedes utilizar un plato o una tapa de una caja de cartón, un objeto poco profundo de madera o de plástico lo rellenaremos de harina, sal, azúcar. Y unas tarjetas (previamente confeccionadas por nosotr@s) donde aparece la imagen de lo que debe “dibujar” con su dedo en la arena.
Luego…
Una vez preparado el material, les daremos el recipiente con arena, sal o azúcar a los peques y les colocaremos al lado del recipiente la tarjeta con la letra del abecedario que queremos que trabajen primero, lo hacemos nosotr@s y después le guiamos con su dedo para que realice el trazo sobre la tarjeta. Los peques deberán observar bien la forma de la letra y reproducirla escribiéndola con su dedo en la arena/sal/azúcar.
De esta manera realizan la letra de forma sensorial y así se hace que se cree cierta memoria en el movimiento para la grafomotricidad a la hora de volver a escribir.
Para ayudarlos a reforzar el aprendizaje de los trazos en niñ@s con discapacidad visual podemos combinar las letras con papel de lija para facilitar su aprendizaje, podemos pedir que previamente la repasen con su dedo (sobre la tarjeta).
Una vez el peque haya escrito la letra, le podemos pedir que allane el terrenito de arena/sal/azúcar con una sola mano y que escriba de nuevo la letra en el recipiente pero esta vez con un lápiz, así trabajará la grafomotricidad ayudándole a practicar el cómo se coloca el lápiz en la mano.
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Fuente: este post proviene de El noticiero de Montse, donde puedes consultar el contenido original.
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