Yo llevaba un tiempo en casa, criando a mis hijas, y como ya os conté en alguna ocasión, aprendí a diseñar para hacerle cuentos a mis hijas. Hasta ese momento yo solo pensaba que en un futuro la crisis mejoraría y volvería a haber oposiciones de Filosofía y yo sería por fin profesora, que era mi sueño.
Estaba bastante frustrada, la verdad, porque hasta ese momento no veía otro futuro posible, y sin embargo, contradictoriamente, la realidad me estaba dejando entrever que ese futuro unidireccional nunca se iba a dar.
Como el papá imperfecto tenía montada la empresa de artes gráficas, y yo ya había aprendido a diseñar, empecé a dedicar unas horas a ayudarle, desde casa. Y cuando las niñas empezaron la guardería (como se llevan poco tiempo iban las dos a la guardería), comencé a ayudarle imprimiendo físicamente.
Por ese tiempo yo llevaba tiempo metida en el mundo de las mamás bloggeras, lo cual quiero decir que me ofreció compañía y consuelo durante mis largos años de soledad al inicio de mi maternidad.
Este es uno de mis primeros diseños (nunca vió la luz)
Y ya de aquella soñaba con hacer camisetas sobre cosas de mamás, e incluso camisetas para premamás. Pero era un sueño lejano. Hice algún prototipo horroroso jaja… pero bueno, aún estaba empezando a desarrollarme como diseñadora jeje…
Entonces es cuando una chica de carácter extraordinariamente luchador llegó a nosotros. Lo dejó todo para crear su propia marca (si me disculpáis, no voy a decir quién es por discreción). Si bien es cierto que su situación económica era estable, no le quita ningún mérito la constancia con la que levantó su marca.
….continuará…..