Siempre he dicho que el gran privilegio de vivir en el interior, son sus sierras que tanto me gustan y el encanto de encontrarte sitios mágicos donde perderse.
En esta ocasión, fuimos con niños y pudimos acceder facilmente hasta allí a pie.
Nosotros accedimos desde una casa de campo donde fuimos a comer, pero en esta pequeña area recreativa forestal, se puede llegar en vehiculo o ir a pie desde Agullent.
En el riachuelo, ya que que hay un nacimiento de agua, estaba lleno de "cullerots " o futuros sapos que los peques investigaron .
A lo largo del camino habían muchas variedades de plantas aromáticas que los los niños reconocieron facilmente.
Hay mesas y una fuente, y es un buen sitio para almorzar los domingos o pasar el día.
No descarto pasar por aqui en un futuro con mis compis runners y volver con la familia con las bicis.
Un paraje al que hacia años que no subía y Jaume descubría por primera vez.
desde aquí podemos ver la pequeñá area recreativa
la fuente proviene de una nacimiento tan sólo unos metros sendero arriba. El agua está siempre helada!
camino llega hasta el Torrater, muy transitado por bicis de montaña o corredores de trail.
este es el nacimiento de agua done cobra vida un riachuelo que desemboca a una fuente.
Aunque no abundan los pinos en esta zona, los que hay dan la suficiente sombra en las mesas.
aunque en la foto salen sólo dos, hay mas mesas con bancos de piedra.
A la vuelta se me ocurrió coger las espigas de una planta y lanzarlas a los peques. Y cómo ya sabéis que cuando algo les hace gracia lo repiten hasta la saciedad... pues eso. El camino de vuelta fué una guerra despiadada de espigas.
No se libró nadie.
No hace falta que os diga por la noche, en el momento ducha , la recolecta de espigas que hicimos al quitarnos la ropa !!
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