Algunas madres sufren obstrucciones mamarias, es decir, cuando una zona del pecho está inflamada y dura y causa dolores y molestias. Hay muchas causas que pueden provocar una obstrucción mamaria, normalmente se forma por el mal drenaje en una zona determinada de la glándula mamaria, que su vez puede estar causada por usar un sujetador no adecuado, por dormir de lado comprimiendo un pecho, etc...
Las obstrucciones mamarias también pueden ser síntoma de alguna infección, creando una inflamación en la pared de los conductos. Sea cuál sea el motivo de la obstrucción mamaria, os voy a dar algunos consejos para evitar las obstrucciones mamarias o para solucionarlas.
Lo primero es asegurarse de que el bebé se agarre bien en el pecho para mejorar la extracción de leche, si tenéis ya la obstrucción lo mejor es que el bebé se coloque con su barbilla hacia la zona afectada. También se recomienda ofrecer más a menudo el pecho afectado, cada dos horas más o menos, para drenar toda la leche posible.
Aunque pueda resultar doloroso, también es bueno masajearse la zona donde está la obstrucción, siempre hacia el pezón, y aplicar calor después de cada toma, bien con toallitas húmedas o en seco.
Imagen: Martin Gommel / flickr
¿Habéis tenido obstrucciones mamarias? ¿las habéis resuelto?