Este proceso se plantea a parejas que han tenido problemas a la hora de conseguir un embarazo mediante fecundación in vitro en varias ocasiones, en base a la edad de la futura gestante o cuando existen mutaciones genéticas insalvables ligadas a un factor femenino.
Requisitos para ser donante de óvulos
Para ser donante, la mujer debe tener entre 18 y 35 años, tener plena capacidad de obrar, un buen estado de salud físico y psicológico y no disponer de antecedentes familiares de malformaciones genéticas.
En este sentido, la donante deberá declarar no padecer enfermedades congénitas, hereditarias o infecciosas transmisibles que pudieran afectar a su futura descendencia.
Además, la mujer no podrá tener seis o más descendientes, ya sea por medios naturales o por reproducción asistida.
¿Qué pruebas se le hacen a la donante de óvulos?
Las donantes serán sometidas a un reconocimiento médico en el que se les preguntará por sus antecedentes familiares.
También se realizarán pruebas para determinar su grupo sanguíneo, el factor RH, cariotipo y la detección de infecciones de transmisión sexual (sífilis, hepatitis B y C y VIH).
¿Cómo es el proceso de obtención de óvulos?
La mujer se someterá a un tratamiento de estimulación ovárica con el fin de reclutar el mayor número de ovocitos en un solo ciclo. Posteriormente se realizará una punción folicular en quirófano bajo anestesia. En un plazo aproximado de 3 horas tras la punción la paciente podrá abandonar el centro médico.
¿Qué riesgos conlleva la donación de óvulos?
El proceso de donación de óvulos no conlleva, generalmente, problemas de salud para la donante. En un pequeño porcentaje de casos, la paciente puede sufrir un síndrome de hiperestimulación ovárica, que implica dolor abdominal, aumento del perímetro abdominal, alteraciones analíticas y que de manera grave afecta al 1% de los casos requiriendo la hospitalización de la paciente. Otros riesgos, de rara ocurrencia, son la infección genital, hemorragias, la torsión ovárica, la punción de un asa intestinal u otra parte de la anatomía, o complicaciones derivadas de la propia anestesia.
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