A quién no le gustaría conocer el secreto de la felicidad? Pues creedme si os digo que la manera de enfocar el trabajo de la pedagogía Montessori tiene mucho que ver con uno de los factores determinantes en la consecución de la felicidad.
Habéis oído hablar del concepto del “flow” o fluir? Es un concepto acuñado por el psicólogo Mihály Csíkszentmihályi, pero no os distraigáis con su apellido impronunciable y seguid conmigo; el flow es un estado en el que la persona está absorta en una actividad que le produce gran satisfacción, con tal concentración que incluso pierde el sentido del tiempo y de los estímulos externos.
Al parecer hay una relación directa entre nuestra capacidad para vivir experiencias de “flow” y nuestra felicidad. Se trata de una felicidad retrospectiva, es decir, no la sentimos en el momento sino cuando salimos del estado de ensimismamiento y concentración del “flow”.
A alguien más empieza a recordarle esto a Montessori?
En muchas ocasiones Maria Montessori mencionó el fenómeno que observaba en los niños tras un periodo de trabajo y concentración con un material o actividad que realmente les atraía. Según explicaba, después de esos periodos de intensa concentración los niños no se mostraban cansados sino felices y relajados:
El niño era atraído por un objeto, fijaba sobre el mismo toda su atención, y se ponía a trabajar sin descanso, con una concentración sorprendente. Y después de trabajar, entonces aparecía satisfecho, feliz y reposado. (M. Montessori; El Niño, el Secreto de la Infancia)
A mí me parece que esto es exactamente a lo que se refiere Mihály Csíkszentmihályi cuando habla del “flow”.
Qué características debe tener una actividad para convertirse en una experiencia “flow”?
Las metas y las reglas deben ser claras y realistas de acuerdo con nuestras capacidades.
Una concentración intensa en un campo de atención limitado.
Pérdida de la autoconsciencia, al fundirse al acción y la consciencia.
Sentido del tiempo distorsionado.
Retroalimentación directa e inmediata (los éxitos y fracasos son evidentes y nos permiten ir ajustando el comportamiento sobre la marcha)
Mantener el equilibrio entre la habilidad y el reto.
El sentido de controlar personalmente la situación o la actividad.
La actividad es intrínsecamente gratificante.
Cuando entramos en el estado de “flow” la acción se lleva a cabo sin esfuerzo.
Vale, ahora ya sí que está claro el paralelismo con Montessori, no?
Casi todas las características con que Csíkszentmihályi define una experiencia “flow” son similares a las características que definen las actividades, el trabajo y la concentración que se fomentan en un entorno Montessori, por lo que me he tomado la libertad de crear la siguiente fórmula:
Y para terminar os dejo esta charla de Mihály Csíkszentmihályi en la que habla un poco más a fondo del concepto de “flow”.
Me encantaría saber qué opináis de todo esto, contádmelo abajo en los comentarios!
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Who would not like to know the secret to happiness? Well believe me when I tell you that Montessori approach to work and concentration has much to do with one of the determinant factors in achieving happiness.
Have you heard of the concept of “flow”? It is a concept coined by psychologist Mihaly Csikszentmihalyi, but do not be distracted with the unpronounceable name and stay with me; the flow is a state in which the person is engaged in an activity that produces great satisfaction with such concentration that even loses sense of time and external stimuli.
Apparently there is a direct relationship between our ability to live experiences of “flow” and our happiness. This is a retrospective happiness, that is, we do not feel it at the time but when we leave the state of absorption and concentration of the “flow”.
Anyone else starting to link this to Montessori?
Maria Montessori often mentioned the phenomenon observed in children after a period of work and concentration with a material or activity that really engaged them. As she explained, after those periods of intense concentration children were not tired but happy and relaxed.
The child was attracted by an object and focused her full attention on it, and began to work tirelessly, with surprising concentration. And after work, then she appeared satisfied, happy and rested. (M. Montessori; The Secret of Childhood)
I think this is exactly what Mihaly Csikszentmihalyi refers to when he speaks of “flow”.
What features should have an activity to become a “flow” experience?
The goals and the rules must be clear and realistic according to our abilities.
An intense concentration on a limited field of attention.
Loss of self-consciousness, to merge action and consciousness.
Distorted sense of time.
Direct and immediate feedback (successes and failures are evident and allow us to adjust the behavior on the fly)
Maintaining the balance between ability and challenge.
The sense of personal control of the situation or activity.
The activity is intrinsically rewarding.
When we enter the state of “flow” the action is performed effortlessly.
Okay, now the link with Montessori is clear, right?
Almost all features that define a “flow” experience are similar to the characteristics that define the activities, work and concentration promoted on a Montessori environment, so I’ve taken the liberty to create the following formula:
And finally I invite you to watch this talk of Mihály Csíkszentmihályi in which he explains a bit further the concept of “flow” (see video above)
I would love to hear what you think of all this, please share your thoughts in the comments below!
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