La respuesta es: el OBJETIVO.
Pensé acerca de esto después de haber conversado con una maestra sobre las lecturas obligatorias en secundaria y bachiller.
Me vino a la cabeza esta pregunta:
“¿Cuál es el objetivo de esas lecturas que (tantas veces) son soporíferas?
¿Fomentar el amor por la lectura? ¿Trabajar la memoria? ¿Mejorar la comprensión lectora?”
Porque hay algo claro: el objetivo determina el enfoque.
Por ello es tan importante que tengas claro en tu mente cuál es el objetivo al iniciar una conversación en la que sabes que habrá puntos de vista enfrentados.
Te invito a descubrir cómo estructurar en tu mente un objetivo claro y no dejarte llevar por las emociones en mi última sesión, puedes verla aquí:
https://youtu.be/eTPCyYJUs8E
¿Te gustaría conocer más claves para tener claridad mental y dominar tus emociones? Agenda una cita conmigo aquí y vemos cómo podemos trabajar para ayudarte a vivir más tranquila y feliz.
Prioriza tu paz.
Fuente: este post proviene de Patricia Sánchez Psicologia, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: