La protagonista de lo que voy a contar ahora se va a identificar rápidamente porque es una de mis más queridas seguidoras y a ella le dedico esta entrada.
Hace bastantes años salió una promoción en la que con cada peti-suise de Danone, venían unas semillas de plantas aromáticas. Yo sembré unas cuantas y germinaron. Cuando crecieron un poco las trasladé a unas pequeñas macetas. Pero llegó el momento de irme de vacaciones y pregunté en mi trabajo, que era donde tenía las plantitas, quién me las iba a cuidar. Mi amiga Vancouver se ofreció y yo me resistí porque no es que las plantas fueran su afición favorita. Pero me pidió que le diera una oportunidad y accedí.
Cuando volví al cabo de un mes, me abrió ella la puerta y me dijo: “¿Me quieres más que a tus plantas, verdad?”.
Y sí. La quería más que a mis plantas y no tomé represalias. Pero ya no había plantas, eran cadáveres muertos por inanición.
Hoy sí tengo un huerto urbano en la terraza. Pero está brotando y no sé qué pasará cuando me vaya de vacaciones. Ya os lo contaré.
De momento os pongo las fotos.
Perejil
Menta
Tomillo y romero
Eneldo
Mala hierba
Parece albahaca, que es lo que sembré
Calabacitas variadas
Y otras plantas de flor, bulbos y ramitas que están saliendo. La mayoría me las han regalado y no sé lo que son.
Geranios
Kalanchoe y unos brotes desconocidos
Si por fin sale la albahaca, haremos una salsa pesto riquísima.