hoy quiero contaros algo que he descubierto recientemente respecto a los niños. Quizá algunas de vosotras, las que sois mamás, ya lo sabéis. A lo mejor vuestros hijos todavía son bebés y aún no os habéis dado cuenta, pero no os preocupéis que ya vengo yo a contároslo. Atención: A LOS NIÑOS LES GUSTA ESTAR SUCIOS. Sí chicas, sí, un niño sucio es un niño feliz. No me preguntéis por qué pero es un hecho. Vosotras, como entregadísimas madres que sois, les bañáis, les cambiáis el pañal, elegís el outfit del día con todo el amor del mundo, cuidáis hasta el último detalle para que vayan perfectos, les repeináis y perfumáis; pero en cuanto salen de su habitación mas limpitos que un San Luis, ellos, que no entienden de formalidades, ¡CATAPUM!: o se empapan con el agua de beber del perro, o cogen una galleta y se restriegan o peor aun ¡cogen un bolígrafo! ¡NOOOOOO UN BOLIGRAFO NOOOOOO!!!! Por Dios nene que con ese estropicio ya no hay remedio.
Esto último, lo del boli, es lo que mas le gusta a Alex (mi hijo), que queréis que os diga yo creo que me va a salir escriba o pintor ;-). El caso es que aunque a veces me enfade he decidido dejar de luchar contra lo imposible y si le gusta estar sucio, disfruta y es feliz, pues ¡venga! ¡A ensuciarnos todos! No voy a ser yo la que limite la creatividad de mi pequeño Picasso.
Hace algún tiempo leí una frase que no se de quién es pero me permito citarla porque le viene muy bien a este tema, dice El arte es la expresión del alma que desea ser escuchada, y eso es precisamente lo que quieren nuestros hijos (o al menos el mío), ser escuchados, que admiremos su arte, así que a eso vamos señoras.
El problema de las pinturas y los niños tan pequeños, a parte de que no controlan y lo mismo se pintan la camiseta, una silla o la pared, es que son tóxicas. Alex tiene 21 meses y claro se lo lleva todo a la boca, o se mete el lápiz en un ojo o en el oído, vamos que cuanto mas peligroso mas divertido, ya sabéis a lo que me refiero. Supongo que muchas de vosotras estaréis en la misma situación que yo, pero ¿qué pensáis si os digo que existen unas pinturas lavables, baratas, que duran muchísimo, se pueden utilizar para pintar con manos o pies, y lo mas importante que SON COMESTIBLES? Sí como lo oís, se pueden comer por lo que no son toxicas.
Las podéis hacer vosotras mismas en casa muy fácilmente con esta receta:
Ingredientes:
♦ 3 cucharadas soperas de azúcar.
♦ ½ cucharada sopera de sal.
♦ ½ taza de Maicena.
♦ 2 tazas de agua.
♦ Colorantes alimenticios.
♦ Cazuela pequeña.
Preparación:
Añade todos los ingredientes (excepto el colorante) en una cazuela pequeña y remover bien. Calentar la pasta hasta que quede espesa y homogénea. Dejar enfriar y ponerla en táperes o botecitos por separado. Lo ideal es que los botes tengan tapa así lo podéis cerrar y reutilizarlo para otro día guardadas en la nevera. Cuando la pasta está templada añadid el colorante, mezclarlo bien y ¡voilá! Ya tenéis vuestras pinturas caseras.
Araceli es maestra de grupo de juegos (Spielgruppe en Alemán) y una vez a la semana nos reunimos un grupo de mamás con nuestros peques en el espacio pedagógico que ha creado, el Eltern-Kind Spass, especialmente recomendado para niños de 18 meses a 4 años, que aún no han asistido a la guardería ni a un grupo de juegos. Este grupo tiene como fin estimular el primer contacto social de nuestros pequeños fuera de la familia pero también está orientado para los padres y madres que tengan niños entre estas edades que, aunque vayan a la guardería, quieran realizar una actividad en la que participen junto con sus hijos. En “Eltern-Kind Spass” estimulamos a nuestros peques mediante el baile, la música, yoga y relajación, pintura, escultura…. Los niños en estas edades son un poco dispersos, no se concentran mas de 10 minutos en una misma actividad pero creo que este programa esta genial para poco a poco enseñarles las rutinas y actividades que encontrarán en un futuro en el Kindergarten. Pero para mí uno de los puntos fuertes de esta actividad, es el empeño que pone en la integración de las familias inmigrantes. En mi caso mi hijo es Suizo y en casa se le habla en Alemán suizo, pero en el caso de niños de Padres hispanohablantes considero esencial para la adaptación al país la presentación que Araceli hace al Alemán de una manera progresiva mediante canciones, cuentos, vocabulario…. Y a mi también me viene genial porque cada día aprendo algo nuevo.
Espero que este post os resulte interesante y por supuesto que lo pongáis en practica, ya veréis que rato mas divertido pasáis en casa todos llenos de pintura hasta la cejas.;-)
Con cariño,
Silvia.
Silvia.coralish@gmail.com
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