Ingredientes (para 2 personas)
2 patatas medianas
Medio calabacín
Unas tiritas de cebolla
Una cucharadita de azúcar moreno
3 huevos
Sal
Aceite
Modo de hacerlo:
Pelamos las patatas y los calabacines y troceamos (os parecerá mucha cantidad, pero el calabacín al cocinarlo, reduce un montón). Le echamos sal y freímos con bastante aceite.
A que no se nota la diferencia entre el calabacín y la patata??
Mientras, batimos los huevos y apartamos.
En otra sartén echamos un chorrito de aceite y las tiras de cebolla con una pizquita de sal, lo dejamos pochar a fuego medio-bajo. Cuando veamos que está más o menos transparente, echamos el azúcar y removemos. Esperamos a que la cebolla coja un color castaño y en ese momento sacamos y la unimos a los huevos batidos.
Cuando la mezcla de patatas y calabacín esté hecha, la sacamos con una espumadera para escurrir un poco, y vamos vertiendo en el huevo. Mezclamos todo muy bien.
Calentamos una sartén pequeña "manchada" en aceite. Vertemos la mezcla cuando esté ya caliente y dejamos hacer, le damos la vuelta con la ayuda de un plato, y la cocinamos del otro lado. Cuando esté doradita la sacamos y lista para comer!!
La verdad es que sino lo sabes, los calabacines pasan totalmente desapercibidos, por lo que para niños que no les gustan las verduras es una idea estupenda para camuflársela. Y la cebolla caramelizada le da un toque especial!!
Habíais probado alguna vez la tortilla así? Qué os ha parecido? Si os gusta la receta os agradecería que la compartierais.