1. Vamos a comenzar por las cositas de bebé, en este punto depende mucho si das a luz en la seguridad social o en un hospital privado, pero a grandes rasgos algunos pañales, gasas, el gorrito para las primeras horas, calcetines, bodys de manga larga (mejor si se abren por delante), una mantita fina (tipo muselina de algodón) y la ropa para salir del hospital. Cuidado con pasarnos con la ropita de abrigo porque en los hospitales hace muchísimo calor.
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2. En mi caso el chupete fue imprescindible, sé que mucha gente lo desaconseja porque puede interferir en la lactancia y algunos bebés lo rechazan. Con mi enana fue lo único que la tranquilizaba y no tuvimos ningún problema para instaurar la lactancia con éxito.
3. Algo que yo eche mucho de menos fueron unos calcetines gordos. Durante la dilatación y todo el parto pase mucho frío, así que puede ser buena idea echar un par por si acaso os ocurre lo mismo. Por supuesto, unas zapatillas para andar por casa son básicas.
4. En todos los hospitales se facilita a la madre el camisón (azul y horrible). A pesar de ello, aconsejo llevar un par de camisones con los que vernos un poquito mejor. Si vas a llevarte tus propios pijamas tienen que ser camisones abiertos por delante (con botones o especiales para la lactancia). Además piensa que va a venir a verte mucha gente así que mejor no quedarte medio desnuda cada vez que te levantes.
5. Desgraciadamente cuando salgas del hospital, un par de días después del parto, seguirás teniendo tripita y habrás retenido mucho líquido. Llévate ropa muy cómoda y de la que has usado durante el embarazo. En lo referente a nuestra higiene debes llevar compresas de algodón, discos de lactancia y un neceser básico con colonia, gel, champú... Normalmente a los bebés los bañan en el hospital así que no tienes que encargarte de nada.
6. Alguna crema hidratante para los pezones (yo use Purelan pero habrá mucha opciones). Lo ideal es usarla desde la primera toma y echarte una capa abundante para evitar grietas, heridas y las molestias de los primeros días. Tened mucho cuidado y mirad que la crema sea especifica para la zona y que el niño la pueda chupar sin riesgo para su salud.
7. Puede sonar un poco frívolo pero esos días sueles verte un poco rara, aún con tripa, cara de cansada... No se trata de llevarte un kit de maquillaje completo, pero un poco de colorete, rimmel o una crema hidratante que huela muy bien puede levantarnos un poquito la moral y hacernos sentir mejor. Yo guarde algunas muestras y me las lleve al hospital para ocupar poco espacio en la bolsa.
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8. Personalmente, no llevaría saca leches ni biberones ni nada. Lo normal es que la lactancia se implante poco a poco y no te haga falta nada más. Además, aprovecha que esos días vas a estar muy arropada para preguntar a las enfermeras las dudas o qué postura es mejor para darle el pecho.
9. ¡¡Cargadores!! Para la cámara de fotos, los móviles, la tablet y cualquier cosa que necesites. Son básicos para estos días que recibirás muchas llamadas y con las prisas puedes olvidar en casa fácilmente.
10. Mucha tranquilidad. Las farmacias, supermercados y tiendas no cierran cuando te vas al hospital así que puedes pedir a un familiar que te acerque cualquier cosa sin problemas, a veces nos obsesionamos con llevar de todo. En mi caso, un sobre de jamón rico fue lo mejor que pude pedir a mi padre a las horas de haber tenido a la enana :).
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