Hace unas semanas empezamos a escuchar, en diferentes lugares, el nombre de una nueva revista enfocada a padres y madres que aterrizaba en los kioskos de España. En todos esos lugares, quienes hablaban de ella eran papás y mamás, compañeros de batallas diarias, que tienen una concepción de la crianza muy similar a la nuestra y que aboga por aquello que se ha dado a conocer como crianza con apego o crianza respetuosa. Con esos antecedentes, sólo hacía falta que nos topásemos con la revista en un kiosko de prensa para hacernos con ella a la primera oportunidad. No sé cómo estará todavía el tema de la distribución, aunque teniendo a Panini detrás (ay, qué recuerdos de mi infancia, de los cromos de la Liga de fútbol…) imagino que no andarán escasos de puntos de venta. Nosotros, por si os sirve de ayuda a los que todavía no la tengáis, la compramos en El Corte Inglés.
Antes de redactar este post he querido leerme el primer número de revista Con Apego al completo, para así poderos ofrecer mi opinión bien argumentada. En la Universidad, entre otras cosas (no os vayáis a creer que muchas) me grabaron a fuego ese axioma: Para opinar hay que conocer. La primera conclusión a la que llego es que, si apuestas por este tipo de crianza con tus hijos, los 3,95??? que vale cada número, más o menos el precio habitual tratándose de una revista de periodicidad mensual (o eso es lo que he querido intuir), será una de las mejores inversiones que hagas cada mes.
La segunda es que, después de leerla, me reafirmo aún más en una certeza que se me había pasado por la cabeza en cuanto conocí la existencia de la publicación: El sector editorial español necesitaba como agua de mayo una revista como Con Apego. Una publicación enfocada a padres y madres que rompiese con el dominio hegemónico que venían ejerciendo las ya clásicas Ser Padres, Crecer Feliz o Mi Bebé y yo (a las que por otra parte hay que reconocer su gran trabajo) y lo hiciese, además, abordando la crianza desde un punto de vista respetuoso con los más pequeños de la casa. Lo necesitaba el mercado editorial español y lo necesitábamos los padres y madres (el público, al fin y al cabo), que aún consultando de vez en cuando o siendo lectores asiduos de las publicaciones antes mencionadas, necesitábamos un soplo de aire fresco con el que sentirnos más identificados.
Lo mejor…y lo menos bueno
Este del que os hablo hoy no deja de ser el primer número (espero que de muchos), así que uno, como lector y aún teniendo en cuenta la calidad del mismo, tiene la sensación de que Con Apego mejorará mucho con el tiempo. En todos los sentidos. Sólo es cuestión de que se empiece a engrasar la maquinaria y sus redactores, sabiendo que cuentan con la confianza de los lectores, se suelten y disfruten al 100% de su tarea. Ese quizás, es el pequeño pero que le pongo a este número. Será deformación profesional, pero en lo primero que me fijo siempre (lea un libro, una revista o un panfleto) es en la redacción. En el estilo. Teniendo en cuenta que es un revista con muchas voces, buscar un estilo homogéneo resulta complicado. Por no decir imposible. Pero sí que es cierto que en este primer número hay reportajes muy bien trabajados (en términos de redacción) que conviven con otros, especialmente los de vivencias personales, cuya redacción me parece más propia de un blog. Echo de menos en algunos de ellos más carga de profundidad, esa profundidad que te permite el papel por encima de cualquier otro soporte y a la que los redactores de Con Apego deberían sacarle el máximo provecho. Pero bueno, esto no deja de ser una opinión personal.
Ese es el pequeño pero. Por lo demás, me ha parecido estupendo todo su enfoque, desde el editorial (que ya deja bien claro que en la revista tienen cabida todos los tipos de familia) hasta la temática de los temas tratados (tan diversos como las rabietas, el bullying, la adopción, los partos en casa, las alergias e intolerancias alimentarias, la lactancia, las doulas…), pasando por su diseño y maquetación, limpio, sencillo y que prioriza el texto, o la selección de productos que hacen en sus artículos o en la sección de compras. Un notable alto a todo ello.
Respecto a los artículos, me quedo especialmente con dos de ellos. Ambos por la temática y la forma de abordarla y enfocarla desde la redacción: “El abordaje respetuoso de las rabietas” y “El poder de las palabras y la escucha”. Curiosamente los dos los firma la misma autora, Estela Nieto Durán. El segundo de ellos, más largo, me parece imprescindible. Igual que pasa con el caso de “Preparado para dejar el pañal…sin estrés”, de Armando Bastida, no es que ofrezcan nada extraordinariamente nuevo para quien ha intentado informarse bastante sobre el tema, algo que no hayamos leído ya en otros blogs que abordan la crianza respetuosa, pero se agradecen mucho sus enfoques, que nos recuerden pautas y métodos, que hayan tenido la osadía de llevar a los kioskos unos temas y una forma de afrontarlos que hasta ahora parecían relegados al terreno de la literatura o los blogs.
Así que dicho esto, y si creéis en ella y practicáis en casa la crianza respetuosa, no me queda más que recomendaros esta publicación. Comprarla, manosearla, leerla y sacad vuestras propias conclusiones. Desde aquí, mis mejores deseos para quienes han puesto en marcha esta iniciativa. Larga vida a Con Apego.
Fuente: este post proviene de Un Papá en Prácticas, donde puedes consultar el contenido original.
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