Con la llegada del buen tiempo esta pregunta me la hice yo, Daniel pisó la playa en mayo, con 7 meses, en las que fueron sus primeras vacaciones.
Según algunos pediatras debe evitarse exponer a los niños menores de 2 años al sol. Todos sabemos que son más proclives a quemarse que un adulto. Pero sinceramente, no creo que ningunos padres pongan a “tomar el sol” a su bebé.
Igualmente no son aconsejables los baños en el agua del mar para menores de 6 meses, ya que su piel no está preparada para la aplicación de cremas protectora.
Nuestra pediatra nos aconsejó esperar al año, ya que no le aporta nada bueno a su salud, estando más expuesto a coger gérmenes del agua e hipotermias, por la incapacidad de regular su temperatura.
Pero si que he observado que esto depende mucho de la zona en la que vives, si eres de interior o de costa.
Sea como fuere no está de más tomar algunas medidas para las exposiciones del bebé al sol, mar…para el aire libre.
Aplicar crema con protección solar muy alto, sin olvidar zonas como nariz, orejas, cuello, manitas… independientemente si el día está nublado o muy soleado. Resistente al agua. Aplicarla al menos media hora antes de ir a la playa y renovarla con frecuencia, sobre todo, después del baño.
Utilizar prendas que impidan el paso de los rayos ultravioletas, complementar con gorritas, gafas de sol infantiles.. Y no sólo prendas, también no dejar al aire el culito, para evitar infecciones genitales, lo mejor son los pañales desechables.
Utiliza tiendas parasoles, paravientos, sombrillas, que impidan los rayos ultravioletas, y protejan al bebé del viento, sol…
La arena, taaaaan llamativa para los bebés, sobre todo para ¡comérsela! jijii, les encanta jugar con ella, es ideal para que conozcan nuevas texturas, sólo hay que tener un poco de ojo para que no se la lleven a la boca…
Después de una jornada playera, baño y crema hidratante, que la piel no se reseque ni pique.
En resumen, se puede disfrutar de un maravilloso día de playa, con un poco de sentido común, evitando que nuestros hijos puedan sufrir, un golpe de calor, insolación, deshidratación o quemaduras solares.
Lo más importante, dejar que se diviertan, y pensar en los beneficios de caminar por la arena para la formación del arco plantar, la circulación, cómo el mar fortalece y tonifica los músculos… lo bien que dormirán por la noche… ¡y porque con un buen baño la arena desaparece!