Ayer hablamos de una fábula y hoy vamos a hablar de una parábola tradicional, “El elefante encadenado”, contada por Jorge Bucay, escritor argentino (escritor entre otras muchas cosas). Esta parábola, en concreto, ha sido extraída de su obra “Déjame que te cuente”, libro recopilatorio de cuentos maravillosos, que nos hacen pensar, reflexionar y conocernos mejor a nosotros mismos. El ilustrador es Gusti, de modo que si sumamos autor más ilustrador, el resultado no puede ser otro que un precioso álbum ilustrado.
¿Por qué el elefante del circo, con la fuerza que tiene permanece encadenado a una pequeña estaca clavada en el suelo y no escapa?
Esa es la pregunta que se hace el protagonista de esta historia el día que acude al circo y que desde entonces le ronda día tras día. Pregunta a los mayores, pues ellos saben mucho o eso creía. Un buen día, conoce a alguien muy sabio, que ha viajado mucho por la India y le da la respuesta.
El elefante lleva encadenado desde que era bebé, intentó liberarse, pero claro, no tenía la fuerza suficiente y por más que lo intentó no lo consiguió, hasta que un día dejó de luchar, dejó de intentarlo.
Preciosa parábola en la que se trata de hacer ver a los niños y no tan niños, que muchas veces, somos nosotros mismos los que nos ponemos cadenas, que no hay que dejarse vencer por un fracaso y que hay que luchar, seguir adelante. Que en algún momento no hayamos podido hacer o lograr algo no significa que no podamos.
Tu también crees que no puedes hacer algunas cosas sólo porque una vez, hace mucho, lo intentaste y no lo conseguiste.