No me gusta nada Meicende, pero nada de nada! Y ya empiezo así el post haciendo amigos!! Porque claro.. ahí vive gente, y no poca! Pero mentiría si dijera lo contrario… Los lugares llenos de Fábricas, e Industria de todo tipo, no suelen ser los más turísticos o los más llamativos, eso es así. Una realidad. Aunque… reconozco, que lo que han hecho en Meicende tiene mucho mérito! Y esto si que es merecedor de visitas, y de qué gente de la ciudad, se acerque a pasar una tarde de ocio agradable, y así ya de paso, vea o visite el pequeño negocio de la zona que siempre lo agradecerá.
Hace muchos, muchos años. Cuando no teníamos ni un duro pero había que emprender… Tuvimos una oficina en esta zona, y desde entonces no había vuelto a pisar el barrio, ni siquiera de paso con el coche… Nada! Hasta que un día mientras esperaba a que me dieran el coche en el taller, me puse a pasear y acabé aquí, en el Embalse.
Conocía el embalse de pasar por la carretera que va a Carballo, desde ahí se ve perfectamente, y desde niña lo recordaba. Lo que no sabía era el espacio que habían creado en torno a él. Una belleza la verdad!
Un área de descanso, con ruta para correr, pasear, o andar en bicicleta. Con parque Infantil y también aparatos de gimnasia para adultos. Mesas y bancos de piedra en zonas soleadas, a la sombra y con el único ruido de las aves que habitan la zona. Me quedé realmente asombrada de lo mucho que había mejorado esto, y de lo escondido que está… Ya que no lo tienen muy indicado, y mucho menos promocionado.
El paseo da la vuelta al embalse, tiene unos 5 km de extensión y puedes disfrutar de un respiro en medio de esta zona industrial. Me ha parecido un lugar perfecto para escaparse, y sin duda para conocer.
En la cola de la presa se ha desarrollado un bosque de ribera que ha permitido la cría de aves y de otros animales. Las aves más comunes que pueden avistarse en este rincón de Meicende son el zampullín común, el ánade real y la gallineta común. La mejor época para ver las aves es de Abril a Junio. En otoño e invierno pueden verse cormoranes y patos. También suelen acudir gaviotas por la cercanía al mar, ya que necesitan agua dulce para sobrevivir. En la zona también pueden verse varias ocas, que viven “en semilibertad”y que se dice que son de unos vecinos.
Hay peces enormes, y también grandes tortugas que incluso salen a la orilla a descansar. No es raro ver niños y mayores con bolsas de pan, alimentando a los animales de la laguna, de ahí el tamaño de alguno de ellos. Dicen los que entienden de esto, que se ha creado un entorno de lo más propicio para todas estas especies, así que el Embalse de Meicende se ha convertido en un ejemplo a seguir en espacios como este.
La zona además está muy cuidada, con papeleras, el césped bien cortado, y los parques y columpios limpios. Se nota que hay un mantenimiento. Además tienen una pista de Baloncesto/Fútbol, que está muy bien y dónde es raro no ver a niños jugando.
Así que, un entorno perfecto para una escapada solos en medio de una jornada laboral, o para darle la merienda a los peques mientras juegan y disfrutan de los animales.
Área de descanso Embalse de Meicende
Para acceder, desde Arteixo cogemos la AC- 415 dirección Pastoriza.
*Hay un desvío a mano izquierda por el que se puede acceder en coche. Hay una pequeña zona de aparcamiento, pero también se puede aparcar arriba en la carretera.
Archivado en: Coruña, Viajes Tagged: Actividades con niños en Coruña, Aire Puro, Coruña, Embalse de Meicende, Escapadas con niños, Naturaleza, Travel, Viajes