Los muebles en su justa medida, esta la clave. Los espacios poco recargados aumentan la sensación de amplitud y todavía más, si predomina el color blanco, que hace rebotar la luz y aprovecha al completo los rayos del sol.
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Muchos nórdicos optan por cortinas muy ligeras o por no ponerlas, así se optimiza más la luz natural. También, podemos encontrarnos con armarios sin puertas o si las tienen, dejan ver lo que se guarda en su interior. Por esta razón utilizan mucho estanterías muy ligeras que tienen un gran peso decorativo.
Es muy importante que los niños tengan un lugar dedicado para ellos donde tengan todos sus juguetes a mano. Una buena idea es decorar un espacio para ellos dentro de su habitación con mesas y sillas pequeñas que se adaptan a la estatura del niño.
Foto: estiloescandinavo
Hay que dejar a los niños que jueguen en el suelo, que sientan libertad para dejar llevar su imaginación. Mira esta gran alfombra, es ideal para aportar calidez a la habitación. Además, el vinilo de la pared aporta un toque de color a la habitación.
Foto: estiloescandinavo
No todo es blanco, también los tonos beige y crema pueden adornar una habitación nórdica aportando una sensación más suave. Los muebles en madera natural es la mejor opción para combinarlo.
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Una decoración en blanco con pinceladas negras, también es una idea genial para la habitación de un niño. Colores neutros, que no pasan de moda y se adaptan mejor a diferentes tendencias.
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Esta pared de lapiceros de colores llena de vida al resto de la habitación en blanco. El estilo nórdico es una buena opción para decorar la estancia del pequeño y además, es unisex, puedes adaptarlo tanto a niño como a niña.
Foto: decorandme
¿Te gusta esta decoración para la habitación de un niño? ¿Cómo tienes decorada la habitación de tu hijo?