Esto, entre otras muchas cosas, quiere decir que mi entorno de amigos, se empieza a ver irremediablemente envuelto en esa vorágine de bodas, de 'arrejuntamientos', y de nacimientos de bebés. En mi grupo de la infancia, en el trabajo, por doquier, oigo a padres y madres primerizos felices, pero fatigados y saturados de recibir información, muchas veces innecesaria...
Quien ha sido madre o padre primerizo, entenderá por dónde voy. Ya sabéis, esa sensación de 'lo hago todo mal', antes de cambiar un pañal, o de'¿tan incapaz me veis? si sólo necesito un poco de tiempo...' que invade a la recién estrenada mamá y por supuesto, al padre también. Qué agobio ¿verdad?
Parece que todo el mundo sabe más que tú. Sientes que a pesar de haber llevado al bebé durante 9 meses dentro de ti, no tienes ni el derecho de elegir cómo tratarle,cómo acunarle,lavarle,dormirle...quererle. ¿Tanta ilusión para esto? Y claro, como se trata de familiares y de amigos que quererte, te quieren mucho, pues no puedes hacer nada, salvo callarte como una boba e intentar asimilar 'los manuales verbales' que te va proporcionando la gente.
'Este niño tiene hambre' 'Sientate, que estás muy nerviosa y él lo nota' '¿Le piensas dar sólamente esa cantidad de leche?' '¿Cuándo la primera vacuna?' 'Así no, mejor así..'
¿Tiene esto un final? ¿Llegará el momento en que podréis disfrutar de vuestro bebé, sin tener que pasar ese agobio, esa inseguridad multiplicada por cien, 'gracias' a los consejos de la madre, la suegra, de los amigos...?
Seguro que sí. Así que, mucho ánimo desde aquí a todos vosotros, porque creo, bueno no, estoy convencida, de que no hay nadie que conozca y quiera más a un bebé, que sus propios padres, por eso ellos saben mejor que nadie cómo hacer que estén contentos y felices.
¡Suerte a todos y todas!
Foto. Good evenening world.