Sin embargo, para hacer un poco de voz de la conciencia, hoy te invito a reflexionar.
¿Recuerdas cuando comprar con descuento sólo era posible en rebajas?
Había una vez un Black Friday…
Hace unos años yo misma dejaba instrucciones para acertar con las compras del Black Friday. De eso sólo hace 3 años, y ya empezaba a hablarse de Black Weekend (dos días más de ofertas)
Ahora, en 2017, no entendemos comprar en Noviembre si no nos hablan de descuentos…
Déjame que te cuente algo sobre el comercio
Los comerciantes, como el resto de los trabajadores, aunque amen su trabajo, se dedican a esto para ganarse la vida.
El concepto de REBAJAS / DESCUENTOS, tiene el propósito de deshacerse de los productos de la temporada que termina, y poder hacer sitio a la nueva temporada.
El Black Friday nació en Estados Unidos, como un evento especial, celebrado por las grandes empresas donde, durante 1 día, celebraban con descuentos el éxito de ventas que da comienzo con la campaña navideña…
Pero cuando el cliente se da cuenta de este chollo, decide no comprar hasta esa fecha. Entonces…
Si no compramos nada hasta que nos ofrecen un descuento, las tiendas no tienen resultados positivos que celebrar.
Si les obligamos a hacer descuento, la mayoría, se queda sin margen para continuar trabajando
Consecuencia:
Esto puede llevar a cerrar tiendas.
Esto puede llevar a que bajen la calidad de los productos / servicios que nos pueden ofrecer.
Esto puede llevar a que acaben subiendo los precios iniciales de sus productos y luego les apliquen descuentos para dejarnos contentos.
¿Te convence alguna de las tres soluciones?
Sinceramente, el Black Friday, se nos ha ido de las manos.
Por suerte, hay empresas que son capaces de darle la vuelta al concepto y enfocarlo desde otro punto de vista, aunque también les suponga un coste (siguiendo en línea del post anterior, la ).
Hazme caso: Seamos amables, y agradezcamos cualquier esfuerzo / descuento, por pequeño que nos parezca, que las tiendas ofrecen estos días, en lugar de protestar y criticar lo poco que se estiran.
Para que te hagas una idea, por término medio, las pequeñas tiendas tienen un margen del 30%. Este es su beneficio (al que hay que descontar otros gastos). Si les pedimos que nos hagan descuentos, su margen baja. Si les pedimos que nos los envíen gratis, su margen baja…Si les pedimos que nos den más, se mueren.
Está bien, muy bien, disfrutar encontrando chollos, ahorrando para las obligatorias compras navideñas,… pero no todo vale.
Porque, si somos sinceros, acabamos comprando compulsivamente, sólo por el descuento, siempre más de lo que necesitamos.
Cuidemos el mercado, porque todos formamos parte del mercado, y de manera directa o indirecta nos beneficiamos de él.
Porque queremos vivir bien, pero eso puede implicar que otros se ahoguen.
Y ahora me despido, no sin antes decir que:
Esto es una reflexión personal
Lo digo pensando en el pequeño comercio (las grandes empresas juegan otra liga)
Que cada uno haga lo que quiera.
Ya lo sabes, me encantará saber tu opinión.
Un beso grande.
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