Portada Los puentes del corazón, de Farah Hallal
Hasta ahora tuve oportunidad de leer "Los puentes del corazón" de Farah Hallal, obra que ganó el Aurora Tavárez Belliard del 2019.Para nadie es un secreto que considero a esta escritora el paradigma actual de la literatura infantil de nuestro país, aunque quienes me conocen saben que admiro a muchos de mis colegas y siempre ambiciono equiparar al país con los países más desarrollados.
Se pueden ver mis halagos a través de mis publicaciones. Don Marcio Veloz Maggiolo, José Enrique García, Luis R. Santos, José Fernández Pequeño; Rafael Peralta Romero. Luis Martín Gómez... ¿quiénes más?, resultan ser escritores consagrados y probados en varios géneros que han incursionado en la literatura infantil pero la misma no les quita el sueño, que no es nada malo, pero es así. Y es que mi anhelo siempre ha sido tener profesionales dedicados por completo a la literatura dirigida a la infancia: de 0 a 18 años hasta que se diga lo contrario.
César Sánchez Beras, Virginia Read de Escobal y Farah Hallal constituyen un trío adorable que pone a la República Dominicana en alto con sus obras ya que en sus geografías, en sus palabras, en sus tramas, la sociopolítica de la segunda de las Antillas está presente con distinción.
En el caso de "Los puentes del corazón", la autora saca partido de sus experiencias como madre de poeta, como poeta y como emigrante.
Yo doy fe de las increíbles dotes poéticas que posee su hijo Gael Then Hallal y la lúcida inteligencia de Itzel Then Hallal. Así que la obra es una trama ágil y divertida que trata sobre el desarraigo que no llega a convertirse en tragedia.
Maku, el protagonista llega a Valencia para incorporarse a la escuela ya avanzado el año escolar y se encuentra no solo con maestra nueva, escuela nueva y compañeros nuevos, sino con un idioma nuevo. Obligado a "adaptar" su forma de pensar acostumbrada con nuevas conductas se mete en un lío sin darse cuenta.
Farah Hallal crea el paralelismo de los dos paisajes: el que se abandona y el que se estrena, con la voz de la emoción. Maku, a través de su entorno, sus familiares, sus amigos y recuerdos muestra que está lleno de vivencias que no va a ser fácil abandonar. Y eso tiene sus contras, pero mucho más pro.
El lenguaje, lleno de familiaridad e imágenes nos hace leer todas las páginas buscando el desenlace, lo que para mí es un triunfo pues soy fiel a que esto siempre se trata de divertir y educar en proporciones apetitosas.
Con inteligencia se filtran poemas propios de Gael y otros creados para el personaje Luciano simpático y desproblematizado.
La obra fue premiada por un jurado compuesto por Lucía Amelia Cabral, Dulce Elvira de los Santos y Elizabeth Ovalle.
Farah Hallal
Tal como dije con la obra de Farah Hallal, titulada "Número Ocho" del Barco de Vapor, Editora SM, recomiendo esta lectura no solo para los niños a quienes está dirigida sino a todos cuantos aspiran a ser escritores de literatura infantil porque yo estoy segura de que muchos queremos hacer eso. Con Farah uno se divierte leyendo sus imaginerías, pero también se educa. Es sencillamente, magistral.