Mientras que para algunos padres estos parques infantiles son imprescindibles para que sus bebés puedan jugar de forma segura, otros están totalmente en contra porque creen que limita su libertad de movimientos.
Sin duda, la elección de utilizarlos o no depende de cada padre, pero lo cierto es que a partir del 5 mes de vida del bebé, a los padres nos pueden dar un respiro mientras realizamos otras tareas.
¿Por qué tener un parque infantil?
Los parques infantiles nos permiten tener un espacio seguro y acotado dentro de casa para que nuestro bebé juegue.Si tienes niños pequeños en casa ya sabrás que les encanta jugar y que no podemos confiar en que se queden sentados, tan tranquilos, en el lugar donde les hayamos dejado para que jueguen. A los niños les encanta explorar el mundo que les rodea. Y eso incluye los espacios más peligrosos de casa.
Con un bebé en casa no se puede bajar la guardia ni un solo momento, y eso, además de ser agotador no te permite hacer otra cosa que no sea estar pendiente de ellos.
Por eso, los parques infantiles pueden ser un gran aliado.
Algunos padres se sienten culpables cuando dejan a sus bebés en el parque infantil, pero no hay motivo para sentirse culpables. Eso sí, eso tampoco quiere que “aparques” a tu peque todo el día en el parque mientras tú haces otras cosas. Se trata más bien de dejarlos jugar a ellos solitos un ratito mientras tú haces alguna otra tarea.
Los parque infantiles ofrecen un espacio delimitado solo para ellos, para que jueguen con sus juguetes, exploren su parcelita, vean lo que ocurre a su alrededor y puedan comenzar a valerse por ellos mismos y ganen autonomía.
Dentro del corralito los bebés fortalecerán sus músculos y desarrollarán la psicomotricidad. Pueden gatear dentro de él, ponerse de pie agarrándose a la malla o al borde superior o practicar sus primeros pasos.
Así que, podemos decir que un parque ofrece seguridad y libertad a los niños y tranquilidad y también libertad a los padres.
Buenas prácticas para el uso de los parques infantiles
Como he dicho antes el parque nos da libertad tanto a los padres como a los niños, pero tenemos que empezar a usarlo de la forma adecuada si queremos que sea beneficioso tanto para los bebés como para nosotros.Cuando vayamos a utilizar el parque por primera vez debemos tener un periodo de adaptación.
Nuestro bebé no está acostumbrado a estar sin nosotros, y si lo dejamos de golpe dentro del parque podría asustarse y rechazar su uso. Así que al principio lo utilizaremos solo unos pocos minutos, siempre con nosotros delante, preferiblemente jugando con el bebé o al menos hablando con él. De este modo se sentirá acompañado y estará más relajado.
Cuando el niño esté preparado lo podrás empezar a dejar solito, pero no por mucho tiempo, tienes que ir a hacerle visitas cada poco tiempo.
Es muy importante que nunca utilices el parque como castigo o lo relacionará con algo negativo en vez de asociarlo al lugar divertido en el que se debe convertir.
Si por cualquier motivo observamos que nuestro pequeño se empieza a agobiar dentro del parque lo tenemos que sacar inmediatamente para que no le coja manía.
Tampoco abuses de él. Está genial que el niño se divierta en el parque pero no puedes dejarlo “aparcado” en él todo el día. Lo ideal es no dejar al niño más de 30 minutos en el parque, y si en alguna ocasión lo tienes que hacer que sea algo excepcional.
Puedes dejar en el parque sus juguetes favoritos, pero no te pases. Deja sólo 1 o 2 juguetes que le gusten y cambiáselos cada cierto tiempo para que reciba otros estímulos y no se aburra.
Colócalo en un lugar seguro. Intentar poner el parque alejado de sitios potencialmente peligrosos como los radiadores, cortinas o muebles con esquinas afiladas. Y por supuesto, si el parque tiene ruedas no olvides bloquearlas antes de usarlo.
De vez en cuando intenta cambiar el parque de sitio para que el niño no se aburra de ver siempre lo mismo.
Consejos para elegir el parque infantil más seguro.
La seguridad de nuestros pequeños es lo más importante por eso nos tenemos que asegurar que reúne los requisitos de seguridad necesarios.Tiene que tener una estructura lo más rígidas y estables posibles.
Uno de los requisitos fundamentales de un buen parque o corralito es que tenga una base blanda para que si nuestro pequeño se cae no se haga daño.
Además, el borde superior también debe ser acolchado para que si se golpea con él o lo muerde no se lastime.
Tiene que tener una estructura estable, con varios puntos de apoyo para evitar que se pueda volcar.
La altura interior del parque debe superar los 60 cm, mientras que el ancho y el largo debe superar el metro para que el pequeño tenga suficiente espacio para moverse y jugar libremente.
La malla debe tener un espacio adecuado para evitar que los pequeños deditos de nuestro bebé se queden enganchados en ella.
Si es un parque infantil plegable el sistema de bloqueo no puede estar accesible al niño.
Tiene que estar realizados con materiales no tóxicos.
Asegúrate que no tenga piezas pequeñas que se puedan desprender y el bebé pueda tragar.
¿Y tú, qué opinas de los parque infantiles? Si estás buscando uno en esta tienda infantil puedes ver las mejores opciones.