¿Por qué JUGAR en educación infantil es importante para los niños?

¡Hola, grupo! ¿Sabéis que hay personas que piensan que el juego en la infancia no sirve para nada y que es una pérdida de tiempo? En el post de hoy, vamos a defender la idea de que jugar en educación infantil es importante. Para empezar hablaremos brevemente de los tipos de juego que se pueden dar en el rango de edad 0-6 años, y después explicaremos los numerosos beneficios que tiene esta actividad. ¿Preparados? ¡Vamos a ello!

Tipos de juego

Posiblemente sepáis que cuando los niños van creciendo, sus juegos evolucionan, cambian, se transforman y pueden convertirse un poco más complejos a medida que pasa el tiempo. Yo os voy a hablar de los tipos de juego más comunes que se dan entre los 0-6 años. Quizás leyendo la entrada muchas personas se den cuenta de que jugar en educación infantil es importante por muchas razones.

Juego libre

Observar a los niños cuando están llevando a cabo el juego libre es una de las cosas más bonitas y especiales de ser educador infantil. En este tipo de juego, los peques hacen movimientos y gestos sin sentido y sin ningún objetivo claro. Según vayan creciendo, pueden incorporar y escoger algunos materiales para el juego libre. Es genial ver lo creativos e imaginativos que pueden llegar a ser.

Cabe destacar que el juego libre se produce de forma espontánea y es recomendable que los adultos no interfieran ni dirijan la actividad. Este tipo de juego desarrolla la imaginación en los niños y les prepara para un futuro cercano. Además, a mí me parece una idea estupenda dejar un espacio a los peques para que lleven a cabo sus propios juegos inventados y creados por ellos.

Juego en solitario

Hay algunas familias que sienten preocupación al observar que sus hijos juegan solos. Si algún papá o mamá está leyendo esta entrada… ¡no os angustiéis ni alarméis! De los tres a los dieciocho meses, los bebes pasan la mayoría de su tiempo jugando en solitario. Ellos están increíblemente inmersos y concentrados en sus propios movimientos y acciones y puede que no se den cuenta de que hay más niños a su alrededor.

Lo que están haciendo es explorar su espacio físico, conociendo nuevos materiales y aprendiendo diferentes movimientos. Les encanta ver lo que pasa si mueven el peluche o si agarran un juguete que tenga algún tipo de sonido-música. De esta manera, están descubriendo por ellos mismos aspectos interesantes y llamativos de su entorno. Con el juego en solitario también se empieza a desarrollar la autonomía de los niños.

Juego Paralelo

El juego paralelo suele aparecer a los dieciocho meses y consiste en que varios niños están jugando en el mismo lugar, pero cada uno de ellos desarrollan diferentes actividades. En un primer momento (y os hablo de mi propia experiencia), parece que los peques están cada uno en su mundo y a su rollo, pero si os fijáis y les prestáis un poquito de atención, también están observando a los demás niños.

De esta manera, están sucediendo tres cosas importantes:

los niños están compartiendo el mismo espacio con otros. Por lo tanto, puede empezar la convivencia y la comunicación.

están desarrollando la atención al observar las actividades que hacen los demás niños.

y aunque ellos no sean conscientes todavía, están aprendiendo muchas cosas de los demás.

Juego Asociativo

Alrededor de los tres a cuatro años, algunos peques prefieren jugar con otros niños en vez de con los juguetes. ¿Qué quiere decir esto? Que comienza una socialización básica. El juego asociativo es una actividad muy importante para los niños porque empiezan a aprender lo que pueden hacer y lo que no, y también se dan cuenta de lo que pueden conseguir con la ayuda de los demás niños.

En el juego asociativo no se establecen reglas, pero los peques suelen tener metas similares. Este tipo de juego favorece cuatro conceptos importantes para el desarrollo de los niños:

los niños comienzan a comprender que compartir espacio y materiales puede ser más divertido

se estimula la comunicación y el desarrollo del lenguaje

fomenta la capacidad de resolver problemas

se favorece la cooperación y la colaboración entre los niños. Los peques son conscientes de que entre todos es más sencillo y divertido llegar a la meta.

Juego físico y motor

Los juegos físicos y motores también son muy importantes en el desarrollo de los niños. No podemos pretender que los peques estén sentados y quietos la mayor parte del tiempo dentro del aula (para mí sería una locura). Los juegos motores favorecen el ejercicio físico. Así, los peques están fortaleciendo los músculos y las articulaciones. Con el simple hecho de poner algo de música y bailar con los niños ya estáis facilitando el movimiento.

Además, los juegos motores y físicos ayudan muchísimo a desarrollar la atención y concentración para después realizar alguna actividad más compleja o concreta. También, con este tipo de juegos se pueden empezar a fomentar valores importantes para la vida y el futuro cercano y habilidades sociales útiles para el día a día y para la convivencia dentro de la escuela infantil.

Juego de fantasía

Cuando trabajaba en escuelas infantiles, me encantaba ver cómo los peques creaban y se inventaban historias para interpretarlas con los demás niños. En su mundo hacían de veterinarios, peluqueros, profes, barrenderos, bailarines… y era simplemente genial. A través de los juegos de fantasía, los niños aprenden a pensar de manera abstracta, a desarrollar su imaginación y creatividad y a expresar sus emociones con los demás.

Jugar en educación infantil es importante porque…


Porque el juego favorece el desarrollo motor y el ejercicio físico. Como os comentaba antes, los juegos de movimiento ayudan a que los niños fortalezcan los músculos, las articulaciones y la coordinación de las distintas partes del cuerpo.

Porque el juego es una excelente herramienta para desarrollar la socialización. Las relaciones con otros niños y con los adultos ayudan a los peques a conocerse así mismos y a su entorno y les prepara para las situaciones diarias de un futuro cercano.

El juego en educación infantil favorece muchísimo la creatividad y la imaginación. Estos dos conceptos son realmente importantes para la autonomía, la iniciativa y la resolución de conflictos que pueden ir surgiendo dentro del aula.

Porque el juego genera nuevas experiencias a los niños. ¿Y qué beneficio tiene esto? Pues que se da la oportunidad de que los niños desarrollen una actividad nueva, se equivoquen y lo vuelvan a intentar para hacerlo mejor. Jugando se adquiere diferentes conocimientos y aprendizajes.

Mediante el juego los niños empiezan a aprender valores importantes del día a día para dentro y fuera de la escuela infantil.

El juego favorece el autoconcepto y la autoestima. Jugar es una herramienta genial para que los niños sean conscientes de sus fortalezas y de sus debilidades. Cuando los peques están jugando a las construcciones y consiguen terminar un bloque se sienten orgullosos de sí mismos y eso ayuda muchísimo a favorecer una autoestima sana. 
Estas seis razones describen muy brevemente por qué jugar en educación infantil es importante, pero, ¿sabéis qué es lo que más valoro yo? Que los peques cuando juegan son felices, se ríen, disfrutan y se lo están pasando genial. ¡Se están divirtiendo a tope y aprendiendo cosas nuevas al mismo tiempo! Así que… si un día vuestros hijos os dicen que en la escuela infantil han jugado a un montón de cosas… ¡sonreír y sentiros genial por ello!

Fuente: este post proviene de Nunca jamás y yo, donde puedes consultar el contenido original.
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