Muchas veces creemos que recibiendo charlas y haciendo muchas cosas diversas seremos buenos padres.
Realmente hay un principio fundamental que debemos de aplicar aún antes de ser Padres y es sanar nuestro pasado, sanar cada cosa que hemos sentido durante nuestro crecimiento, como niños, adolescentes, y adultos. El haber sido creados por Padres humanos nos ha hecho tener algunas cicatrices, no porque ellos fueran malos sino porque no tuvieron quizá la instrucción que necesitaron para educarnos. Con todo y muchas deficiencias trataron de hacer lo mejor.
Y es aquí, cuando podemos entender y meditar por un momento cómo fue nuestra niñez, adolescencia y parte de nuestra edad adulta? Muchas veces no nos gusta darle una visita al pasado y nos hacemos de la vista gorda, creyendo que el tiempo cura todas aquellas heridas. Pero lamentablemente; no es así, el tiempo lo que hace es empeorar esas heridas.
Si tú, no has reflexionado un momento y has tomado la decisión de perdonar todas las ofensas de tu pasado con respecto a tus padres, definitivamente tendrás problemas serios en criar a tus hijos, y más críticos si los quieres criar con principios Cristianos.
Debemos de limpiar todo patrón equivocado y toda autoridad que le hemos dado a el diablo para no permitirnos ser los Padres que Dios espera que seamos. Es momento de sanar toda herida y empezar a construir hogares sanos, limpios bajo el único standar correcto, bajo el único ejemplo adecuado! Y es el de Dios, nuestro Padre Celestial, el está dispuesto a enseñarte como darle una Paternidad correcta a Tus hijos, como instruirlos con amor, como darles la corrección necesaria y como mostrarles el único camino correcto que es Jesus!
Te invitamos a que puedas leer el libro de proverbios y puedas enriquecer tu vida mediante la palabra de Dios.
Fuente: este post proviene de Blog de Mel de Juan, donde puedes consultar el contenido original.
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