Un 70 porciento de las mujeres sufre en el embarazo la aparición de manchas en las mejillas, en la frente y en el labio superior, que son conocidas como cloasma. Las causas son la exposición solar y la predisposición genética, que una vez que aparecen hay que utilizar cremas con filtros solares.
Entre algunos tratamiento se puede hacer una dermoabrasión o exfoliación química, se usan las mismas sustancias de las cremas antimanchas, pero más concentradas, como son el ácido glicólico, la hidroquinona, y el ácido kójico.
Este tratamiento lo debe realizar un esteticista experimentado, aunque cabe destacar que los dermatólogos pueden utilizar concentraciones más elevadas y así el resultado es mucho más efectivo, pero también son mayores las reacciones tal como irritaciones, y enrojecimiento.
El tratamiento con láser y otras fuentes de luz no necesita anestesia, aunque en algunos casos las cremas anestésicas ayudan al paciente. Es recomendable tomar sol las semanas previas y posteriores, y utilizar cremas que ayuden a prevenir la repigmentación.
En cuanto a las estrías se debe prevenirlas evitando los cambios de peso bruscos y aplicando a diario un producto antiestrías. Sin embargo, cuando ya están presentes, son muy pequeñas y tienen una coloración rosada es posible mejorar su aspecto.
Entre algunos tratamientos se puede hacer una Electrofororación, cabe destacar que está contraindicado durante la lactancia. El aparato está constituido por un equipo electrónico y una serie de electrodos de aplicación dérmica, tipo roll-on.
El alto voltaje que usa este tratamiento abre los poros y empuja las sustancias activas del producto aplicado, consiguiendo una máxima penetración, las sesiones indicadas dependerán de cada caso.
La flacidez y la celulitis no son exclusivas del embarazo, pero la gestación las puede agravar. El objetivo es poder movilizar los acúmulos de grasa del cuerpo y facilitar la eliminación, recuperando la firmeza perdida.
Muchas mujeres, durante y después del embarazo, van perdiendo la elasticidad del pecho, se puede aplicar agua fría, a través de duchas, con movimientos circulares y extiéndelos hacia el cuello.
Existen aparatos específicos de hidroterapia para el pecho, los cuales se acopla al grifo de la ducha. Aunque si se desea algo más especializado se puede tratar algunos con otros tratamientos.
En el Liftform se inicia con un peeling enzimático a base de papaya, luego se aplica fibroína de seda que limpia los poros y además alisa la piel. Se seleccionan los principios activos según el caso, y se introducen mediante una microcorriente indolora. Luego se concluye con un masaje con alguna crema específica para los senos rica en sappninas y flavonoides que ayudan a reafirmar y definir el pecho.
Durante el embarazo se padecen algunos problemas circulatorios en las piernas, generando varices. Pueden mejorar, e incluso desaparecer aplicando diferentes técnicas, para favorecer la circulación de retorno se emplea el drenaje linfático o la presoterapia y para las lesiones vasculares láser.
La Terapia fotodinámica es una nueva técnica, que combina el láser Nd-Yag con espumas esclerosantes de polidocanol, mejora cuatro veces más el aprovechamiento del láser, aporta seguridad, disminuye el dolor y permite una mayor rapidez en el tratamiento de las varices.
El Sclero Plus Candela es un láser decolorante que elimina las venas superficiales de las piernas y la cuperosis del rostro. Este método emite pulsos más largos que permiten mayor penetración de hasta 2 mm de grosor.
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