Hay creencias sobre el tema, pero la realidad es que se puede hacer desde recién nacidos, sólo es necesario tomar en cuenta algunos cuidados y revisar si realmente lo requiere. Sin embargo, cuando están pequeños no es recomendable limarlas, pues son muy delgaditas y puede ser contraproducente.
¿Cómo cortarlas?
Para cortarlas se recomienda utilizar cortauñas para bebés, que son más pequeños. También puedes utilizar tijeras de punta redondeada para cortar únicamente la parte que sobra.
Lo importante es hacerlo mientras duerme, para evitar que se mueva.
Si ves que las notas son largas, pero tienes miedo de lastimarlo, también puede aplicar un truco de las abuelas: muérdele las uñas con tus dientes, de este modo lograrás sentir en dónde empieza su dedito y no habrá riesgo de que lo lastimes.
¿Cada cuánto se deben cortar?
Esto dependerá mucho de qué tan rápido crecen las uñas de tu bebé. Hay bebés que necesitan un recorte semanal o cada diez días y otros a quienes les crecen muy lento y no será necesario hacerlo de modo tan constante.
Lo importante es que estés pendiente de qué tan largas están para evitar que se lastime él solo.