La especialista en odontopediatría considera que, el mayor número de niños con caries con respecto a unas décadas se debe principalmente a los padres y cuidadores de los pequeños, puesto que la responsabilidad de la higiene bucal de los niños en de los padres hasta que estos cumplen entre ocho y diez años.
Cuando no hay una adecuada higiene oral, la caries aparecen. Desde sus primeros días de nacido, el bebé debe recibir una atención especial comenta la doctora Ruiz: una limpieza con gasa húmeda de las encías después de comer y apenas aparece el primer diente debe ser cepillado. Y cuando ya haya dos piezas juntas será necesario usar el hilo dental.
Desde la clínica dental de Alcalá de Henares, Saludalia Dental también hacen hincapié en los padres, y les aconsejan que deben preocuparse en el tiempo que transcurre entre cepillado y cepillado puesto que “no tiene el mismo riesgo de caries el niño que desayuna y que después se va al colegio con los dientes lavados por un adulto, que el niño que sólo se cepilla por las noches él solito”. El motivo de ellos se debe a que cuanto más tiempo estén los azúcares en contacto con los dientes, más ácido se producirá y el riesgo de caries será mayor.
“Verificar la cantidad de flúor de los productos de higiene bucal y consultarlos con un odontopediatra experto es de vital importancia” detalla Ruiz, ya que este componente ha demostrado ser muy eficaz en el combate a las bacterias que producen la caries.