La educación de los hijos es una de las principales prioridades en la vida de cualquier padre o madre. Durante la infancia y la adolescencia, los jóvenes van forjando poco a poco la persona en la que se van a convertir en un futuro. Su etapa académica es un proceso de construcción que requiere de un asentamiento de cimientos sólidos para así crecer con miras al éxito en la edad adulta. En este sentido, la duda sobre si matricular a los pequeños en un colegio público o privado resulta muy habitual en la actualidad. ¡Veamos qué opción es mejor!
Enseñanza internacional o enseñanza nacional
Antes de nada es importante destacar que la educación pública en España goza de una enorme calidad. A diferencia de lo que sucede en otros países, este servicio estatal mantiene un buen nivel y forja generación tras generación a estudiantes de primera categoría. Sin embargo, el problema reside más bien en el sistema académico nacional y, en colegios privados, encontramos alternativas de interés como el bachillerato británico en ELIS Murcia.España no está considerado como un país especialmente relevante en su sistema educativo; quedando muy abajo en las listas europeas. Por suerte, muchos centros de enseñanza privada ponen el foco en otras regiones del mundo que, como Inglaterra, sí están entre los mejores países en términos de educación.
Si bien es cierto que no todos los colegios privados gozan de esta educación bilingüe e internacional, lo que sí es seguro es que los colegios públicos españoles no dan dicha opción. Un sistema que, además, prepara a los jóvenes para su salida a un mercado laboral cada vez más globalizado en el que el inglés ya no es un extra, sino un imperativo.
Sistemas de enseñanza que van más allá de lo académico
Saber de historia, de matemáticas, de lengua, de biología y, en definitiva, de cualquier asignatura que se imparta en los colegios es fundamental. Como bien hemos comentado, el sistema español público no tiene nada que envidiar al concertado o al privado en esta materia. No obstante, conviene valorar cómo muchos centros privados van más allá de lo puramente académico.Temas como el desarrollo personal y la salud mental han sido siempre asignaturas pendientes en nuestro país. Aprender la lección es importante para el futuro; pero más lo es sacar a flote todas las habilidades sociales y emocionales que todos los niños llevan dentro. Algo en lo que dichos colegios privados sí se suelen enfocar.
Por otro lado, conviene destacar que este tipo de centros tienen menos alumnos en cada aula; lo cual permite que el equipo docente se centre de lleno con cada uno de los estudiantes que tiene a su cargo. Una apuesta por la enseñanza personalizada que promueve una mejora en los resultados, esta vez sí, académicos.
Grandes oportunidades a futuro
Todo lo mencionado hasta el momento sobre los centros escolares privados tiene un resultado muy evidente: la optimización de las oportunidades profesionales en un futuro. Es más, formarse en estos colegios supone un aval sobre la calidad educativa y, por ende, abre más puertas en el mercado de trabajo.Recuperemos el marco lingüístico de las escuelas con un sistema de enseñanza bilingüe. Los alumnos culminarán sus años de colegio con un nivel de inglés incontestable, siendo capaces de desenvolverse con total solvencia en el idioma. ¿Por qué conformarse con las oportunidades laborales españolas cuando el mundo ya no sabe de fronteras?
Conclusiones: ¿qué colegios son mejores?
A pesar de las cualidades de los colegios privados, cabe no desmerecer el nivel de los centros españoles públicos. Su nivel es equiparable a muchos colegios concertados e incluso privados; por lo que podemos afirmar que la educación gratuita es todo un motivo de orgullo en nuestro país.
Ahora bien, el volumen de opciones en el caso de los privados se multiplica. Esto, como padre, te brinda la libertad suficiente como para elegir qué valores y métodos didácticos deseas para tus pequeños. Siempre y cuando el centro privado goce de reconocimiento en el sector, estarás regalando a tus hijos la formación más competitiva posible.