El momento más importante a lo largo de todo el embarazo es el parto. Es el objetivo último en que culminan los nueve meses de gestación. Por ello, pensar cómo queremos y dónde deseamos que se desarrolle es algo muy importante. ¿Hospital público? ¿Privado? ¿Cuál debemos escoger?
Por un lado, si eliges un hospital público, debes tener en cuenta que te corresponde el que esté ubicado cerca de donde vives, por lo que cuando estés lista y tengas que salir corriendo al hospital esto es una gran ventaja. Además, sea cual sea tu situación económica te van a atender, ya que la sanidad es pública y de todos.
Por otro lado, la mayoría de los centros públicos cuentan con anestesista y ginecólogo de guardia las 24 horas, por lo que no tendrás que preocuparte por si va a haber alguien en el momento adecuado. Sin embargo, sí que es cierto que no podrás elegir ginecólogo y para algunas mamás la confianza en su médico es fundamental. Otro de los inconvenientes del hospital público es que seguramente tengas que compartir habitación, lo que significa también que habrá mayores restricciones en lo que se refiere al número, la duración y el horario de visitas.
Cada hospital tiene sus ventajas e inconvenientes, si queréis recibir una atención personalizada vuestro lugar adecuado es el hospital privado, pero si no os lo podéis permitir o defendéis la sanidad pública ante todo, no os preocupéis, estáis en buenas manos
¿Dónde vas a dar a luz?
Imagen: dsyzdek/flickr