El día 2 de mayo va a hacer un año que vi por primera vez el mar, fue en Asturias en un viaje que organizó mi tia Mari como regalo a mi madre que cumple años el 2 de mayo.
No sabiamos donde ibamos a ir, era una sorpresa y mi madre estaba desorientada a la hora de hacer la maleta.
Nada más bajarnos del coche vi el mar y un montón de arena y antes de entrar al hotel que estaba al lado, me fui disparada hacia allí. Hacía frío, pero a mí me daba igual, quería saber que era todo eso, no había visto tanta arena y tanto agua en mi vida ( ni en el parque, que mira que hay arena, ni en las piscinas o rios de la comarca de mi pueblo que mira que agua tenemos en cantidad).
Me lo pasé genial, menos mal que mi madre llevaba mucha ropa para cambiarme, porque me empapé las botas los calcetines y los pantalones.
El fin de semana pasado también fuimos mis padres, mis tios y mis primas a Asturias a Cangas pero esta vez no fuimos a la playa aunque igualmente me lo pasé genial.
Mis abuelos maternos acaban de venir de San Sebastián y mis abuelos paternos vuelven el jueves de Cádiz así que ya tengo metida desde hace semanas la frase "quiero ir a la playa". Lo primero que le digo a mis abuelos por teléfono es "¿hola, que tal la playa?".
Este año será difícil que vayamos de vacaciones porque mi padre ha empezado nuevo trabajo pero siempre tenemos alguna escapada de fin de semana o muy cerquita muy cerquita el Lago de Sanabria, que mira que me lo pasé yo bien el año pasado en julio allí con Violeta, Tati y Rocio que estaban en una caravana.