La lactancia materna es el acto de amor, compromiso y aceptación más grande que puede existir entre una madre y su hijo, siendo la forma más efectiva de prevenir la malnutrición, garantizar la salud y la supervivencia de los niños. No en vano la Organización Mundial para la Salud (OMS) recomienda amamantar a los bebés durante los seis primeros meses de vida, y prolongarla hasta los dos años o más junto con la alimentación complementaria.
Es por eso que los momentos destinados a este disfrute de unión y compañía deben ser placenteros para ambas partes. Esto significa que toda madre debe aprender a elegir cuáles serán las mejores posturas para amamantar a los niños, de acuerdo a las necesidades propias del bebé, el lugar, las circunstancias, la comodidad y las preferencias de la madre.
A continuación, veremos un compendio de las posturas más recomendadas para evitar los molestos dolores de espalda y demás incomodidades. Cuando de gemelos y mellizos se trata, podrás optar de la misma forma por cualquiera de las posturas antes mencionadas. Todas se pueden ajustar a las necesidades de dos niños con la misma comodidad.
Sentada
Es una de las posturas más comunes que adopta la madre, sentada sobre un sillón y sosteniendo al bebé que mama estirado. De igual forma la madre puede sostener a su bebé en posición “de rugby”, cuando el cuerpo del niño pasa por entre el brazo de la madre y sus pies apuntan sobre su espalda. En esta misma postura, la madre también puede sentar a su bebé sobre su pierna en posición de caballito mientras se alimenta.
Para la postura sentada recta, puedes ayudarte con el cojín lactancia Boppy Circles de Chicco que le brinda más comodidad.
Postura ventral
Es la más natural que puedes adoptar, recostada sobre la cama o sobre un sillón y el bebé encima También denominada de crianza biológica, en esta posición el niño instintivamente agarra el pecho de la madre y mama fácilmente sin causarle daño.
Recostada de lado
Puedes optar por esta postura especialmente durante las noches y también cuando descansas durante el día. Simplemente recuéstate de un lado y recuesta a tu bebé del mismo lado para que tome su leche.
Ayudas indispensables para el periodo de lactancia
Si estás amamantando a tu hijo, otra opción te recomendamos proveerte de algunos artículos que sin duda te serán de mucha ayuda. El kit de productos básicos de lactancia materna, por ejemplo, te ayudará durante los primeros días para que te encuentres seca y mantengas el flujo de leche. También contarás con una crema humectante especial en caso de que tengas los pezones irritados.
Otra herramienta útil para el periodo de lactancia es el extractores de leche Comfort de Philips en modelo manual y eléctrico, una excelente alternativa para extraer la leche que tu bebé necesita, de modo que pueda ser alimentado cuando no estés en casa.