Llegó un momento que tanto moco no lo dejaba ni comer, así que lloraba y lloraba. Después tres días de angustia innecesaria decidimos ir al doctor. He de decir que no soy muy partidaria de las medicinas ni del uso de medicina tradicional para peques, soy más de homeopatía pero cuando se necesita ayuda todo es bienvenido, y de aquí a que encuentre en #puebloquieto un pediatra homeópata es harina de otro costal #diriamiabuela.
El mismo día que el piratilla inició con sus síntomas virulentos nuestro perro Raj decidió enfermarse también. Porque no, tuve una de esas escenas que uno piensa que solo pasan en las películas y no en la vida real. Al mismo tiempo que el piratilla hacia sus deposiciones el perro tomó cartas en el asunto y decidió evacuar en el hogar, al mismo tiempo… La que suscribe se encontraba duchando, cuando salí de la ducha OOOOOOhhh mier?.!!
El piratilla está comenzando andar y gatea a la velocidad del rayo así que me puse manos a la obra? Con toalla cayéndose por el camino y niño directo a la deposición del perro, corrí hasta que lo alcancé. Lo metí en su cuna y lo distraje como pude para que no llorara. Me puse mi uniforme de #recogecacas y a funcionar. Primero cambié al piratilla y lo dejé entretenido, mientras tomaba aire y miraba para otro lado me daba a la tarea de la limpieza de de la sorpresa de nuestro familiar de cuatro patas. Después de la peripecia familiar decidimos pasear para digerir el mal rato.
Asi que tras esta hazaña solo me quedó acudir el mismo día al doctor y al veterninario?