Por donde empezar? Ya sé os pondré en antecedentes. He de decir que el piratilla empezó la semana con babysitter y guarde, todo al mismo tiempo. Tres ó cuatro horas al día cuatro veces a la semana. A partir de las doce del día llegaba mamá y pasábamos el tiempo como muéganos, el uno pegado al otro. Dormíamos las siestas juntos, lloraba cada vez que no lo tenía en brazos y no había motivación por el juego, mamá tenía que estar presente para que empezara a interactuar.
La experiencia con la babysitter no fue muy positiva. Tuvimos un mes de adaptación con babysitter cuando empezamos con la guarde. Desde el momento que la veía entrar por la puerta su cara se transformaba en pánico escénico y lloraba tan afligido que nadie que no fuera mamá lo hacía callar. Cuando mamá llegaba a casa todos los juguetes seguían en el mismo lugar donde los habíamos dejado y pensarás que lindos recogieron, no, no, aquí las babysitter no recogen juegan y te dejan todo el tiradero en casa, algo que pasa a ser secundario y menos importante cuando sabes que tu peque está pasando un buen rato. Al ver que la adaptación de casi dos meses no tuvo éxito decidí eliminar esta opción de nuestras vidas. Bien o mal pero lo hice.
Posteriormente pasé a la fase de estar a punto de sacar al piratilla de la guardería. Así es! Pensé que después de un mes de adaptación y que siguiera llorando desconsolado cada vez que lo dejaba era suficiente para entender que no era el momento para empezar con esto. Pero la magia surgió y de pronto el día que iba a ser su última vez?. las estrellas empezaron aparecer y la música sonaba, me extrañé tanto que hasta miré alrededor para saber que eso estaba pasando realmente. El piratilla NO LLORÓ!! Lo dejé en la guarde sin lágrimas, ¡¡todo un gran paso!!
Os contaré que el programa de la guarde, se llama MOTHER´S MORNING OUT ofrece a las mamás tres horas durante uno o dos días para poder dejar a los peques.
El lugar es fantástico y tiene muchas cosas positivas, son pocos niños, alrededor de cinco, las profes son un encanto y lo que me hace sentirme con confianza es que las veces que ha llorado siempre lo cogen en brazos y lo consuelan, atendiendo sus necesidades físicas y afectivas . Creo que esto no pasa muy a menudo en las guarderías.
Por el momento es la mejor decisión, es de gran ayuda cuando no hay abuelos ni familia cerca. Tres horas son suficientes para poder sentirme más yo, acudir a mis clases de inglés, pasear con nuestro perro o incluso darme una escapada al gimnasio. Espero que siga evolucionando positivamente.
¿y a vosotr@s como os fue en la adaptación de la guarde?