Se ha comprobado que crear patrones alimentarios saludables asegura un crecimiento óptimo en cada una de sus etapas, lo cual a su vez reduce las posibilidades de contraer enfermedades ya que esto ayuda a desarrollar un inmunitario sano que los protegerá.
Sabemos muy bien que esta no es tarea fácil, especialmente porque durante cada etapa se deben tomar en cuenta muchas variables. Pero con esta guía —y complementando a nuestro especial realfooding para niños— aprenderás un poco más sobre cómo alimentar de forma saludable a tus hijos, y también sobre todo aquello que debes evitar para cuidar de su salud. Con ayuda de estos tips te resultará más fácil todo lo referente a este tema.
Alimentación saludable en niños: aspectos básicos
A pesar de que no hay una fórmula mágica que solucione todos tus problemas, existen algunas estrategias para motivar a tus hijos a mantenerse sanos y algunos consejos muy buenos para cuidar la salud de todos en casa. Aquí te hemos recopilado los que son para nosotros los mejores.
La variedad nutricional es muy importante
No hay duda alguna de que el balance nutricional es uno de los aspectos más importantes para mantener nuestro cuerpo saludable. Mucho se ha estudiado de este tema, y los expertos concuerdan en que una dieta sana debe incluir proteínas, frutas, vegetales, granos y lácteos en una proporción adecuada. Para integrar todo esto en tus comidas contar con un buen pasapurés eléctrico puede ayudarte a preparar todo lo que necesitas sin complicaciones. Echa un vistazo a nuestras recetas de purés.A continuación, te detallamos todo lo que debes tener cuenta para cada tipo de alimento:
Proteínas. Este nutriente se puede conseguir en una gran variedad de alimentos, incluyendo alimentos ricos en proteína vegetal. De hecho, en tu dieta puedes incluir mariscos, huevos, guisantes, frutos secos, productos de soja e incluso aves de corral para complementar. Lo ideal es evitar en lo posible las proteínas procesadas como los embutidos o las salchichas, a menudo muy solicitados por los pequeños de la casa.
Vegetales. Mientras mayor variedad de verduras sirvas en tus platos mucho mejor, al igual que con las frutas, si hay colores diversos de verduras en tu plato sabrás que estás alimentando a tus hijos correctamente.
Frutas. De ser posible, intenta sustituir los zumos de frutas por el consumo de piezas enteras de fruta de todo tipo. Estas pueden ser frescas, enlatadas en su jugo, congeladas o secas. Pero ten en cuenta que las frutas deshidratadas contienen muchas calorías, por lo que deben consumirse con moderación.
Lácteos. A pesar de que los lácteos son fundamentales para una dieta sana, procura comprar alimentos lácteos con poca grasa y sin azúcares añadidos. Los yogures naturales, acompañados de frutos secos molidos o muesli casero, son ideales para desayunos y meriendas infantiles.
Granos. En cuanto a los granos, evita el exceso de cereales refinados como la pasta, el arroz o el pan blanco; en su lugar, sustitúyelos por su versión integral. Lo mejor será siempre tener en casa granos integrales como la avena o la quinoa, y acudir a harinas integrales para tus elaboraciones caseras.
Mantén una buena hidratación
Aunque es probable que tus hijos prefieran elegir siempre un refresco o un zumo para acompañar sus alimentos, consumir agua durante el día es la opción más saludable para hidratarse, ya que no contiene azúcar ni otros añadidos que puedan ocasionar daños en su salud.No está mal beber un zumo de vez en cuando, sobre todo si es natural, pero el consumo de agua debe ser preferente y abundante a lo largo del día. Así que acostumbra a tus hijos de pequeños a beber al menos 6 vasos de agua diarios.
Organiza un horario de comidas y meriendas
Crear una estructura diaria organizada no solo es una buena estrategia para enseñarle disciplina a tus hijos, sino que además esto los motivará a mejorar su comportamiento y a tener una vida ordenada. Organizar un horario para las meriendas creará hábitos saludables en tus hijos que podrán aplicar durante toda su vida.Además, se ha comprobado que los horarios regulares de las comidas ayudan a mejorar el metabolismo del cuerpo considerablemente. Lo más recomendable es crear un horario de 3 comidas y 2 meriendas.
Limita las calorías del azúcar añadido y las grasas saturadas
Para entender bien este punto hay que diferenciar el azúcar añadido del azúcar común y corriente, presente de forma natural en determinados alimentos. Ciertamente, alimentos como las frutas contienen azúcar natural, pero esta no causa los efectos negativos que sí ocasiona el azúcar añadido que contienen las bebidas energéticas, las gaseosas o los edulcorantes. Así que compra bebidas y cereales con un mínimo de azúcar añadido y limita su consumo.Aunque las carnes rojas son una muy buena fuente de alimentación, estas también contienen muchas grasas saturadas que pueden ser perjudiciales para la salud a largo plazo. En general, reduce el consumo de lácteos enteros y carnes rojas en tu hogar. Para complementar la falta de estos alimentos puedes comprar frutos secos, aceitunas o mariscos.
Elige alimentos con granos integrales
Comprar productos integrales siempre es una buena alternativa para mejorar la dieta alimentaria que tengamos en casa. Los cereales integrales como el trigo entero, el arroz integral y la quinoa son mucho más saludables.Si en tu hogar suelen comer grandes cantidades de pan, te vendrá bien elegir aquellos 100% integrales, estos también son realmente deliciosos y tus hijos pronto disfrutarán de estos tanto como los otros tipos de alimentos. Mira las diferencias entre el pan blanco y el pan integral.
Compra y prepara alimentos con tus hijos
El proceso de cocinar y preparar todo tipo de platos puede ser una actividad muy emocionante para cualquier niño, si desde edad temprana lo invitas a acompañarte durante el proceso de la preparación podrás enseñarle sobre la importancia de cada alimento y esto lo motivará a probar nuestras recetas.Aprende cómo disfrutar de la filosofía Montessori en la cocina.
Expertos recomiendan exponer a los niños a alimentos e ingredientes muy variados ya que esto despertará su curiosidad y, eventualmente, querrán probarlos. Si te preocupa que a tu hijo no le apetezca comer diferentes tipos de alimentos, esta es una buena alternativa para educarlo.
Además, las posibilidades de preparar platos saludables y divertidos para los más pequeños de la casa son casi infinitas. A continuación compartimos algunas ideas:
Recetas divertidas para niños
Recetas para niños que comen mal
Almuerzos saludables para el colegio
Pizzas para niños
Desayunos divertidos con forma de animales
Recetas de pasta para niños
Animales con frutas
Pinchos de frutas
Smoothies con fruta congelada
Helados para niños
Recetas de pescado para niños
Aperitivos saludables para niños
Crepes saludables para niños
Desayunos para niños
Magdalenas sanas para niños
Canapés divertidos para niños
Recetas fáciles para niños (y sanas)
Recetas con queso para niños
Batidos para niños
Conclusiones
Sin lugar a dudas, nunca es demasiado tarde ni muy pronto para comenzar a comer saludable, pero mientras antes le enseñes a tus hijos la importancia de comer sano, mejor. A pesar de que este es un tema muy amplio que involucra muchísimas variables, con estos pequeños consejos podrás asegurarte de que tus hijos crezcan sanos y fuertes. Te invitamos, por supuesto, a informarte aún más al respecto y animar también a tus niños a practicar algún deporte y ejercitarse con regularidad para mantenerse en la mejor condición física para su edad.
Puedes ver el post en la web de BABYCOCINA.