Surgió en MUNDO LUDIC la discusión del bullying hace unas semanas y vimos la oportunidad perfecta para pedirle a nuestros amigos de Educative, especialistas en el tema, que nos dieran unas pinceladas, en base a algunas dudas que nos surgieron, y aquí tenéis el artículo. Esperamos que la información os sea de utilidad y, sinceramente, que no nos tengamos/ no os tengáis que ver en esa terrible situación.
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El acoso escolar o bullying es un fenómeno que se ha dado desde siempre, pero no tuvo repercusión social hasta su tratamiento legal por parte de la Fiscalía de Menores, ya que hasta entonces, era considerado como una circunstancia que debía ser resuelta entre iguales, sin intervención por parte de terceros.
El acoso escolar ya no es un conflicto privado, sino un problema social que debe ser tratado y resuelto por todos. Recientemente, un estudio ha planteado un vínculo entre la intimidación en la fase adolescente y la depresión en la fase adulta. Se trata de un conflicto que si no es tratado a tiempo puede acarrear problemas graves en el normal desarrollo del menor.
Debemos estar atentos, tanto los padres como los centros educativos; el menor sufre la situación en silencio en numerosas ocasiones.
Los menores que son víctimas del acoso escolar se aíslan, no quieren ir a la escuela, suelen tener pesadillas, alteraciones cognitivas, alteraciones del comportamiento y malestar: cefaleas, vómitos, dificultad para concentrarse, tristeza y nerviosismo.
Al menor síntoma que sea identificado, los padres deben informar al centro educativo, pidiendo una cita con el tutor y el director. Los profesionales que forman parte del mismo deberán poner atención en las actividades que realice el menor cuando se encuentre en las dependencias escolares. El acoso escolar es suficientemente visible para quienes ponen atención con la debida diligencia. Si los síntomas persisten y el centro escolar se desentiende, recomendamos que los padres acudan a las autoridades formalizando la oportuna denuncia.
No obstante, hemos sido testigos de la falta de actuación por parte de las autoridades en muchos casos. El motivo principal se encuentra en la inexistencia de pruebas que demuestren el hecho. Precisamente por esto, creando www.educative.es, una agencia de investigación privada especializada en el ámbito familiar, ofrecimos nuestros servicios de investigación en el ámbito del bullying al objeto de obtener las pruebas que acrediten el acoso. Nuestra agencia está formada por detectives privados, pedagogos y psicólogos que trabajamos en conjunto para resolver los conflictos que se presentan en la adolescencia.
Algunos consejos?
Asesorarse debidamente mediante consulta en asociaciones creadas al respecto. Algunos ejemplos: La Asociación No al acoso escolar, la Asociación para la Prevención del Acoso Escolar o la Fundación ANAR.
Escuche a su hijo. Tenga una relación cercana con él, generando la seguridad y confianza que permitirán que le cuente sus conflictos.
Quiera a sus hijos de manera incondicional, sin tener en cuenta sus defectos y virtudes. Es importante que sean capaces de afrontar sus experiencias con la mayor seguridad.
No se paralice ante la desatención por parte del centro educativo. Informe a las autoridades y busque ayuda en asociaciones y profesionales que puedan intervenir y resolver el conflicto.
Roser Ribas,
Educative, Investigación Privada centrada en el ámbito Familiar.
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El post Bullying o acoso escolar se publicó por primera vez en Reflexiones más que lúdicas.
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