La ventaja de esperar la llegada del tercer hijo es que la gran mayoría de puericultura necesaria para el bebé ya la tienes de tus dos hijos anteriores, sobre todo si no ha pasado mucho tiempo desde entonces. Pero siempre hay artículos que por desgaste, por préstamo o por pérdida (voluntaria o involuntaria), no puedes reutilizar.
En mi caso se añade el hecho de que, a lo largo de mi maternidad, he aprendido que la gran mayoría de cacharros que te quieren vender como imprescindibles para el bebé son más bien prescindibles. A día de hoy si me pongo a contar qué necesito realmente, me sobran los dedos de una mano, y no exagero.
Hoy voy a hablar del cochecito del bebé. Creo que fue el primer artículo de puericultura que miré y encargué con el mayor, que reutilicé con la mediana y que espero hacer lo propio con Tercer@. Teniendo en cuenta además que el principal medio de transporte de mi bebé voy a ser yo misma y mis portabebés ergonómicos, el cochecito será secundario. Pero no está de más tenerlo porque habrá momentos que me venga bien utilizarlo. Una cosa no quita la otra, y el uso de cochecito y portabebés es totalmente compatible.
Me gustaría aprovechar el cochechito que tenemos, el Streety de Bebé Confort. En su momento lo elegí porque cumplía lo que buscaba en un cochecito: trío (capazo + silla + grupo 0), ligero, fácil de manejar, fácil de plegar, que la silla se pueda usar mirando hacia mi, que ocupara poco espacio en el maletero y buena relación calidad-precio (lo reservamos en las rebajas de febrero y nos costó 460??? incluyendo bolso con cambiador, un precio excelente, aunque finalmente nos lo regalaron). Cumplió nuestras expectativas, estoy encantada con él.
Lo malo es que solo tenemos la silla. El capazo lo tiré hace unos meses porque cogió humedad, no tenía donde guardarlo, di por hecho que no lo usaría más y me dio pereza limpiarlo a fondo. Es lo que me pasa por pensar que no tendría más hijos, qué ilusa. El grupo 0 nos lo robaron del coche, estaba nuevo nuevo así que espero que el gracioso de turno le esté dando buen uso (ojalá le caiga un rayo).
Así que se me plantean varias opciones a valorar, que no me preocupan para quitarme el sueño pero no dejo de pensar en ellas, al menos para poder decidir con cierto criterio llegado el momento.
Evidententemente la primera opción es intentar no gastarme dinero en este producto. Primero, porque a estas alturas me parece absurdo gastar una media de 500-600??? en un cochecito que se que le voy a dar poco uso, por mi experiencia, y más teniendo una silla de paseo en condiciones y una silla de segunda edad, ambas nuevas.
Segundo porque, puesta a gastar dinero, prefiero hacerlo en un buen sistema de retención infantil, que para mi sí es una de las compras de puericultura obligada, necesaria e importante, la que de verdad merece la pena invertir el dinero. Y nuestra situación económica es la que es, no podemos derrochar, tenemos que ir a lo práctico y necesario, así que el dinero del cochecito prefiero destinarlo a una buena silla de coche a contramarcha para usar desde el nacimiento.
Así que las opciones a tener en cuenta son:
- Apañarnos con lo que tenemos. Que vendría a ser usar portabebés full time hasta que Polvoroncill@ pueda ir en la silla de paseo. Cosa que no veo descabellada, ya que con la mediana, aunque al principio usaba el carro, conforme fui dominando más el porteo éste quedó en segundo plano. Ahora que tengo un máster en porteo, me da que el carro tiene pocas posibilidades.
- Comprar el grupo 0 compatible. Como tampoco tenemos sistema de retención infantil para usar desde el nacimiento, nos va a hacer falta seguro. Así que una de las opciones es comprar el grupo 0 del Streety -nuevo o de segunda mano, aunque aceptamos préstamos- que es un gasto asumible, lo usaríamos de silla de coche, obviamente, y provisionalmente sobre el chasis para traslados del coche a casa y pequeños recorridos. El grupo 0 no es una silla de paseo, eso hay que tenerlo en cuenta, pero le daríamos un uso puntual como tal.
- Adaptar un capazo ligero. Hoy en día encontramos en el mercado capazo ligeros universales adaptables a sillas de paseo. Teniendo en cuenta el poco tiempo de uso que tiene el capazo, es una opción a considerar valorando bien los diferentes modelos, como este que he visto en Tot a lot (permitidme la publi a la tienda de mi amiga Adriana de Somos Múltiples). Es un producto económico que podría hacerme un buen servicio. La ventaja de la silla del Streety es que se reclina totalmente, la hamaca es muy amplia y queda a una altura media, además de que se puede poner frente al manillar, por lo que es ideal para usar con un capazo así.
- Aceptar préstamos de cochecitos. Tengo la tremenda suerte de que varias amigas me han ofrecido sus cochecitos completos, en concreto, tres. Lo que me frena de los préstamos es la responsabilidad que suponen, ya que basta que te presten algo para que se estropee o que lo roben, como me sucedió con el grupo 0 del Streety. Así que está ahí, como opción en el aire, no lo descarto pero tampoco es la primera opción por el compromiso que supone, aunque agradezco su ofrecimiento y poder contar con ellos.
Uno de los que me han ofrecido me gusta mucho, es el Cybex Callisto (soy muy fan de esta marca) de hecho cuando la mamá lo eligió fue siguiendo mis recomendaciones, y si ese modelo hubiera estado disponible cuando esperábamos al mayor creo que lo habría elegido, o al menos hubiera sido una de las opciones a tener en cuenta, pero por entonces Cybex aún se estaba introduciendo en España y no era muy popular.
- Usar la silla de segunda edad. Además de la silla del Streety tengo nueva nuevísima la sillita de paseo que compramos para la mediana, la Cosatto Lite Supa modelo Hello Dolly (creo que ya está descatalogada) y a la que dimos poquísimo uso. Miré muchas sillas de segunda edad por internet antes de decidirme por esta y me costó mucho encontrarla en tiendas físicas. La ventaja de esta silla, además de estar nueva (y de ser preciosa) es que viene con reductor para recién nacido, saco nórdico y protector para la lluvia. La pega, para mi gusto, es que, aunque se reclina 180º, queda muy bajita y mira hacia delante, y no hacia mi, y eso es un gran inconveniente, motivo por el cual es la última opción.
Como suele suceder cuando tienes varias opciones y mil dudas es que cada día, según te pille, ves más ventajas a unas que a otras. En todo caso se que mi bebé no va a estar desamparado, tendrá mis brazos para llevarlo donde haga falta, siempre bien cerquita de mi, así que tengo tiempo para valorar cuál se adapta mejor a nuestras necesidades y posibilidades, y siempre puede surgir alguna nueva oportunidad.
En todo caso, ¿me ayudáis a decidir?, ¿cómo os apañaríais vosotr@s?, ¿qué opción veis más acertada?. Si tenéis alguna nueva propuesta por supuesto será muy bien venida.