Me imagino que ya les ha pasado, que en ocasiones perseguimos por una meta, pero de camino alcanzamos otras que no imaginábamos. En este caso quiero contarles mi experiencia de cómo el haber iniciado con una rutina diaria con Lorenzo me ayudó a disminuir el consumo de leche de fórmula.
En los primeros días me sentí culpable como mamá por muchas cosas, pero a pesar de mis baby blues y de observar todo lo que no estoy haciendo tan bien como otras mamás, decidí tenerme compasión, reconocer que estoy haciendo mi mejor esfuerzo con el mayor amor del mundo.
Desde el día uno Lorenzo ha tomado leche materna y leche de fórmula. Cuando estaba recién nacido nos indicaron que la rutina al despertarse era: cambio de pañal/ baño, leche, dormir y va de nuevo! Conforme pasaron las semanas, Lorenzo no se dormía tan fácil, y yo asumía que debía darle más leche.
Sin embargo ese método era riesgoso, porque Lorenzo no «se sentía lleno». Empezamos a ponerle la chupeta cuando calculábamos que ya era suficiente y empezamos a desesperarnos al no saber cómo dormirlo. De repente se me iba el día con un bebé despierto que no me dejaba hacer nada más que estar pendiente de él.
Angustiados buscamos ayuda, porque hemos aprendido que por más instinto de padres es una excelente idea buscar apoyo y asesoría. Priscilla Mora (ABC de los padres) llegó porque queríamos aprender a dormir a Lorenzo, pero de repente eso transformó toda nuestra logística.
Con ella aprendimos la rutina EASY (Eat – Activity – Sleep – Yourself). De esta manera al despertarse lo alimentamos, luego hacemos alguna actividad (cambio de pañal/ baño, juegos, etc.) hasta que se ve cansado, ahí lo dormimos y mágicamente EXISTE tiempo para la mamá!
Aprender a dormirlo sin leche no fue tan complicado (hay videos en su canal donde explica los 5 pasos). Todo es aprender a tener paciencia y ser constante. Con pocos días de aplicarlo fuimos viendo cómo lo lográbamos, todo fluía y podíamos disfrutar mejor de los lapsos que permanece despierto. Lo más asombroso para mí fue cuando de repente me dí cuenta que ya casi no estaba alistando chupones!
Cómo?
En mis inicios como madre todo fue caos, pero no me juzgo porque fue lo mejor que pude hacer con lo que tenía. Pero para mí el orden es mágico, siempre busco tener una vida ordenada hasta el último detalle. Al lograr ordenar la rutina, era capaz de darle a Lorenzo tomas de leche cada tres horas, sin necesidad de agregar el chupón porque él se veía saciado. Un bebé con hambre demuestra su malestar de muchas maneras, me explicaba Pri, estar tranquilo y feliz no es una de ellas.
Así que les cuento cómo es nuestra rutina ideal. Hay días que no pasa así por muchas razones, hay siestas más largas, hay salidas o visitas, hay días con más o con menos chupones. Lo importante es seguir adelante, aprender a leer las necesidades y deseos del bebé y sobre todo disfrutar de cada etapa juntos!
6:00am: LM y un rato en la cama
7:00am: baño y juegos en su cuarto (lo dejo en su cuna y me baño yo)
8:00am – 8:20: siesta (ME TIME!)
9:00am LM y juegos o salimos por alguna diligencia
11:00am: siesta (ME TIME!)
12:00md: LM (casa) o chupón si andamos fuera, actividades
2:00pm: siesta (ME TIME!)
3:00pm: LM (casa) o chupón si andamos fuera, actividades
5:00pm siesta (ME TIME!)
6:00pm LM y actividades para dormir (baño, masaje, móvil con luces en la oscuridad, etc)
8:00pm LM (si está despierto) o chupón (me garantizo cuánto toma). *Esta toma casi no la hacemos porque muchas veces la anterior se atrasa un poco y ya cae rendido.
10:00pm chupón (me garantizo cuánto toma). Lo hago antes de acostarme, usualmente sigue durmiendo directo o se despierta y sonríe pero se duerme durante la toma.
4:30 – 5:00am LM. Esta toma la hacíamos acostados y terminábamos haciendo una siesta en la cama, pero últimamente amanece congestionado y tomar leche en esa posición le incomoda, así que lo he cambiado por una toma sentada y al terminar lo vuelvo a acostar en su cuna.
Al describir la rutina me río de todos los cambios que pasan durante los días, pero no perdemos el norte. Cada nueva mañana Lorenzo nos sonríe y volvemos a empezar con la mejor actitud. Lo interesante es cómo las etapas de los bebés pueden sentirse eternas cuando pasan los días sin dormir, pero a la vez pasan volando porque crecen muy rápido. Lorenzo ya está llegando a sus 4 meses y eso ha traído muchos cambios en sus actividades y rutina.
Espero que esto les sirva como una guía básica, para que no se desesperen y logren ajustar lo que necesiten en sus rutinas. La Lactancia Materna llegó a ser un martirio para mí al inicio; todavía no somos LME, pero hemos podido derribar temores y he logrado sentirme capaz en mi papel de madre. He aprendido a creérmela! jaja!
un abrazo,