Cansada, después de un largo día, intentas arrastras a tus hijos a través de la rutina de noche.
Después de 2 libros, muchos abrazos, besos, cantar mil veces sus canciones favoritas, por fin consigues acostar al pequeño.
Mientras cierras la puerta de su cuarto despacio, para no despertarle, te armas de valor y energía para acostar ahora a los mayores, que parece que han recibido un chute extra de energía y están pasados de vueltas.
No es que criar a niños pequeños sea fácil, pero desde luego, una de las partes más complicadas de ser padres es acostar a los niños.
¿Verdad?
Sé que te sientes identificada, que te has visto en esas líneas.
El momento de irse a la cama a veces parece una cámara oculta, que te deja con la energía suficiente para sentarte el resto de la noche en frente de la tele.
Pero, la rutina nocturna no tiene por qué ser así!
Estos sencillos consejos te ayudarán a crear una rutina de noche rápida y fácil para tus hijos. Establecer una rutina marcada supuso un cambio radical en nuestra casa.
1. Hora de acostarse adecuada
Asegurarse de que tus hijos duermen suficiente te garantiza que no estarán DEMASIADO cansados a la hora de acostarse (lo que hace que la rutina nocturna se alargue y acabéis agotados todos) y que por la mañana estaría contentos y bien descansados.
Cosas a tener en cuenta al elegir la hora de irse a dormir:
¿A qué hora se despiertan mis hijos normalmente?
¿Cuántas horas de sueño necesitan durante la noche según su edad?
En mi casa, los niños se acuestan normalmente a las 8 y se despiertan a las 8.
2. Comenzad a desconectar una hora antes de irse a la cama
Empezar una rutina tranquila antes de la hora de acostarse, le mandará una señal muy importante a tus hijos. Un indicativo de que es hora de dejar las actividades del día y preparar la casa y a ellos mismos para la noche.
Algunas cosas que podéis hacer para desconectar:
Recoger: le dice a los niños que es el momento de guardar todo en su sitio, se ha acabado el momento de jugar y hay que prepararse para irse a la cama
Apagar/Bajar las luces: así creareis un ambiente mas relajado y su cerebro empezará a producir las hormonas necesarias para descansar.
Bañarse: el baño es la manera perfecta de que los niños se calmen y se preparen para dormir.
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3. Usad temporizadores
Si notas que la rutina de noche se alarga más de lo normal y que es difícil controlar a tus niños para que hagan las cosas, usar temporizadores puede ser la respuesta. (A mi me funciona muy bien este, es un temporizador visual para niños).
Los temporizadores aportan un límite marcado en una actividad y son muy efectivos a la hora de conseguir que los niños se concentren y colaboren. Especialmente cuando no paran de pedir 5 minutos más o un cuento más.
Puedes usar un temporizador:
En la hora del baño
Al recoger
Al lavarse los dientes
Al leer los cuentos
Si lo que más les cuesta es ordenar y recoger, probad a usar el temporizador en ese momento. Ya sea el que venden para niños, o una cuenta-atrás en tu móvil (déjalo a la vista para que los niños puedan verlo). Comprobarás que tardan mucho menos en terminar.
4. Mantén la calma
Cuando todos estamos agotados, la hora de irse a dormir puede acabar en un berrinche de proporciones desorbitadas.
Los padres somos los que marcamos el tono a nuestros hijos. Es nuestro deber mantener la calma y seguir contentos. Aunque a veces no lo parezca, los niños no son los que controlan el humor de la casa. Somos nosotros.
La manera en la que respondemos a nuestros hijos, es la clave de un ambiente tranquilo. Si conseguimos crear un ambiente nocturno tranquilo para nuestros hijos, obtendremos una rutina de noche mucho más fácil en compensación.
Estrategias para mantener la calma:
Haced un poco de yoga en familia antes de dormir
Abrazaos
Dales un masaje después del baño
Creo que es imposible abrazar demasiado a un niño, especialmente durante la noche. Los niños están más tranquilos y felices cuando sienten que están conectados contigo. Los abrazos también les ayudan a calmarse y a dormirse felices.
5. La constancia es la clave
Los niños necesitan constancia en sus rutinas. Les aporta seguridad saber qué es lo que esperar a continuación.
Ser constante y mantener la calma mientras haces cambios en su rutina, es muy importante mientras todos os ajustáis a la nueva norma.
RUTINA NOCTURNA VISUAL PARA NIÑOS
Esta herramienta es muy útil a la hora de crear una nueva rutina de acostarse. Los niños no tendrán que acordarse de lo que viene a continuación, y podrán ir siguiendo los dibujos para realizar la siguiente tarea.
Puedes descargártela aquí.
Pon fin a las batallas antes de irse a la cama
En casa, hemos creado una rutina de noche sencilla y regular, que hace que nuestros hijos se vayan a dormir sin alargarlo durante horas.
Cuando es el momento de desconectar, los niños saben exactamente lo que se espera de ellos. Usamos temporizadores si los necesitamos para mantenerles centrados en la tarea que están haciendo y trabajamos para mantener un ambiente relajado.
Al ser constantes, hemos conseguido establecer una rutina para irse a dormir sin lágrimas.
¡Y tú también puedes con nuestros consejos!