Empieza el fresco, empieza el gym, empiezan las colecciones de revista que jamás acabaremos, y cómo no, empiezan las clases! [ansiosas esperábamos todas las mamis este dia de que nuestros peques vuelvan unas horitas al cole].
Y para celebrarlo, he preparado una serie de videos para que os sirva de ayuda (en menor o mayor medida) antes de empezar el curso. En el primero vamos a aprender a forrar libros con forro adhesivo.
No es que yo sea una experta, ojo! Pero sí que se me da más o menos bien forrar con adhesivo (llevo desde los 12 años personalizando mis carpetas con recortes, así que sí... algo he forrado ya).
Lo único que necesitas es:
-el libro en cuestión
-forro adhesivo
-tijeras
-un trozo de algodón
-kilos de paciencia
CONSEJO: Lo más importante de todo es hacerlo despacio. Si tienes prisa, déjalo para otro dia.
Para empezar, corta el forro del tamaño del libro abierto, dejando un margen a todo alrededor de unos 2/3 cm.
Ahora, con cuidadín, retira el plástico protector del forro adhesivo, sólo unos 3 o 4 cm, de lo que sería el lateral del libro. Antes de empezar a pegarlo, ubícalo bien centrado sobre el borde del libro.
Comienza a frotar la zona pegada (que será de 1 cm solamente, puesto que los otros 2 cm quedarían al aire en el borde) con el algodón.
El algodón sirve para evitar las dichosas pompitas de aire que se acumulan entre el forro y el libro, ya que se desliza mucho mejor que los dedos sobre esta superficie, más rápido y fluido.
A continuación, ve quitando el protector poco a poco con una mano, mientras con la otra frotas con el algodón. Sigue despacito hasta llegar al filo del lomo del libro.
Una vez en el lomo, para. Tienes que hacer unos cortes antes de seguir.
En las 4 esquinas de esa cara del libro, debes hacer cortes de unos 45º, para poder plegar bien los bordes hacia dentro.
Una vez cortados, pliégalos hacia dentro para que no entorpezcan el resto del proceso.
Seguimos, dale la vuelta al libro para terminar la siguiente carilla.
Igual que antes, retiramos el protector poco a poco mientras frotamos el algodón, de lado a lado, hasta que se termine por completo.
Una vez retiramos totalmente el protector, volvemos al proceso de cortar las esquinas en 45º.
Esta vez verás que tienes (en los extremos del lomo) un sobrante. Ese córtalo al ras del lomo.
El resto de bordes, pliégalos hacia dentro igual que antes, ¡y listo!
Nuestro libro está protegido perfectamente y listo para ir a la escuela.
Ya sabes que en el video se ve mejor la explicación que con mis palabrejas, así que te invito a que le eches un vistazo para aclararte las dudas.
Hasta mediados de septiembre, todos los videos consistirán en nuevas ideas o ayudas para la vuelta a clases, así que suscríbete a mis redes sociales si no quieres perderte nada.
¿Tienes algún método especial para forrar libros?
¿Te animarás a usar el algodón que no engaña?
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#hazmefeliz
